Este jueves, el mundo de la televisión se estremeció con la emotiva despedida de la querida conductora Fiona MacDonald, quien anunció su propia muerte a través de una publicación póstuma en Instagram.
La exconductora australiana de los programas infantiles “Wombat” y el show de juegos “It’s a Knockout” falleció a los 67 años, tres años después de haber sido diagnosticada con una enfermedad de la neurona motora.
“Adiós, mis amigos. Mi hermana Kylie está publicando esto porque me fui del edificio. Espero estar mirando hacia abajo desde una nube”, fue el mensaje que MacDonald dejó en su cuenta, mostrando su característico humor hasta el final. La publicación también reveló los detalles de sus últimos momentos:
“Anoche puso fin a unos meses muy duros. Fue muy tranquilo que los niños y Kylie se quedaran conmigo para despedirme. Si bien nunca quise morir, la idea de dejar mi cuerpo torturado fue un alivio”.
Conductora vivía una etapa “dura” y “desesperante”
A MacDonald se le diagnosticó la enfermedad en noviembre de 2021, una condición que progresivamente afecta las neuronas motoras, responsables del control muscular.
En su publicación, la presentadora describió los últimos meses de su vida como una etapa “dura” y “desesperante”. La incapacidad para tragar alimentos sólidos o tolerar bebidas proteicas la llevó a un estado de debilitamiento extremo, mientras “lentamente se estaba muriendo de hambre”.
Aunque ni MacDonald ni la cadena que cubrió su caso, la Australian Broadcasting Co. (ABC), especificaron el tipo exacto de enfermedad de la neurona motora que la afectaba, el padecimiento es parte de un grupo de trastornos neurológicos progresivos, como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y la parálisis bulbar progresiva. Estas enfermedades no tienen cura y suelen afectar la capacidad para caminar, hablar, tragar y respirar.
Fiona MacDonald y su decisión de no seguir con el tratamiento
“El humor negro que me fue útil durante los primeros años de este viaje se convirtió en desesperación”, confesó en su publicación. MacDonald explicó que, tras una profunda reflexión, decidió detener el tratamiento médico y recibir cuidados paliativos en sus últimos días. “Cuando amas la vida tanto como yo, se necesita mucho coraje para tomar decisiones que conducen a la despedida”, agregó.
MacDonald, que siempre fue conocida por su espíritu positivo, concluyó su mensaje con una bendición irlandesa: “Que el viento esté siempre a tu espalda, que el sol brille cálido sobre tu rostro, que la lluvia caiga suavemente sobre tus campos hasta que nos volvamos a encontrar, y que Dios te sostenga en el hueco de Su mano”. Y con un emotivo cierre, escribió: “Llevo tu amor y tu risa conmigo y espero que recuerdes los míos”.