En el año 2013, se dio a conocer la historia de Paloma Noyola Martínez, una joven de Matamoros, Tamaulipas, cuyo destino dio un giro inesperado al ser destacada en una revista Wired como “la próxima Steve Jobs”. Su relato destacó aún más al descubrir que había cursado sus primeros años escolares en una primaria ubicada junto a un vertedero de basura.
A pesar del entorno desafiante, la vida de Paloma experimentó una metamorfosis gracias al enfoque educativo del profesor Sergio Juárez. El maestro derribó las barreras al prescindir de escritorios y sillas en sus clases. En este nuevo espacio, la imaginación y la curiosidad de los estudiantes fluían libremente, marcando un viaje transformador en la vida de la joven estudiante.
El 19 de octubre, la película Radicales llegará a los cines, sumergiendo al público en la cautivadora travesía del maestro Juárez guiando a sus estudiantes, coincidiendo con el año en el que Paloma cursa, desde la prueba Enlace hasta alcanzar la primera posición. Todo ello es posible gracias a la producción y actuación de Eugenio Derbez en el papel del profesor, bajo la dirección de Christopher Zalla.
“Quería saber más de su historia. Me preguntaba cómo una niña de una escuela rural logró ser considerada una pequeña genio. Para mí es un cambio radical en mi carrera, es totalmente diferente a todo lo que normalmente hago. Esta vez es más una misión, no vengo aquí por conseguir una taquilla, quiero mandar un mensaje, han sido 100 años en los que la educación ha sido la misma en el mundo entero.
“Sergio cansado de ver que los niños ya no responden igual encontró un método que hizo una gran diferencia y creo que es hora de plantearnos cambiar un poco la educación a nivel mundial y eso es lo que estamos luchando”, expresó Derbez en conferencia de prensa.
El comediante dejó claro que su intención no es politizar ni señalar a nadie. Más bien, busca inspirar a través de la historia de un mexicano ingenioso que superó adversidades. Invitó a que la película sea apropiada por todos, como una herramienta para iniciar conversaciones sobre los desafíos que enfrentan los niños no solo en México, sino en todo el mundo.
“La idea no es tomar una postura política, quisimos enfocarnos en la historia inspiradora de un mexicano que con ingenio, como todos los mexicanos, logró sin recursos y ante un panorama totalmente adverso, salir adelante”, agregó.
Inspirar para lograr cambios
En el evento, la estudiante, que ahora está cursando el noveno semestre de la carrera de Derecho, expresó su gratitud hacia el profesor por sus enseñanzas, y a Derbez por llevar la historia a la pantalla grande.
“Fue el que me impulsó y cambió mi mentalidad, gracias a eso pude seguir avanzando, seguir estudiando y preparándome. Las matemáticas siempre me van a gustar, las sigo disfrutando muchísimo, pero con los años, fui teniendo nuevos intereses e inquietudes por conocer más, y me enamoré de la carrera de Derecho”, contó la alumna.
En su momento, el profesor compartió su motivación para cambiar el rumbo educativo al presenciar la tristeza persistente en sus alumnos al llegar al aula. Observar a estudiantes enfrentar dificultades, a veces con el deseo de regresar a casa en lugar de disfrutar el momento de clases, lo llevó a reconsiderar su enfoque.
“Hace falta despertar en ellos la curiosidad y la motivación, creo que eso es algo bien importante que como profesores tenemos como misión, que al día siguiente regresen con ganas de estar frente al maestro, a sus compañeros, socializar”, indicó.
Derbez y la comedia
Tras participar en la cinta Coda, Derbez comprendió la necesidad de evolucionar su carrera, sin abandonar la comedia que ama, pero aspirando a ofrecer una experiencia más profunda. Su deseo es que sus películas no solo provoquen risas, sino también dejen una impresión duradera.
“Mi carrera tenía que evolucionar, no pienso dejar la comedia, me encanta, pero creo que hay que ampliar el horizonte; quiero que la gente se siga riendo conmigo, pero que también viva una experiencia más tridimensional”
“Me encanta la comedia, sigo creyendo que es más difícil hacer reír que llorar, pero por alguna extraña razón a las comedias las pelusean en los festivales y premios. Por eso creo que muchos comediantes como Robin Williams, Jim Carrey, Ben Stiller y Adam Sandler acaban del lado del drama. porque es bien complicado y te das cuenta que el drama te da estatus, respeto, y eso me pasó ahora que en Coda, tuve accesos que antes no”
