De acuerdo con un estudio realizado por investigadores de salud de Estados Unidos de Scripps Research, el coronavirus presentó una mutación específica que aumenta significativamente su capacidad para infectar las células.
Con esta investigación, las autoridades de salud podrían explicar el por qué los primeros brotes en algunas partes del mundo no terminaron abrumando los sistemas de salud como sucedió en Nueva York e Italia, por ejemplo.
A su vez, los expertos de Scripps Research revelaron que a la mutación del coronavirus se le denominó D614G y aumentó el número de “picos” del coronavirus, que es la parte que le da su forma distintiva.
De hecho, esta mutación presenta un mayor número de picos en el virus, lo que permite que el coronavirus tenga una capacidad mayor para unirse e infectar a las células saludables.
“El número o la densidad de los picos funcionales del virus es 4 ó 5 veces mayor debido a esta mutación”, dijo Hyeryun Choe, uno de los autores principales del estudio.
Además, los investigadores estadounidenses señalaron que hasta este momento todavía se desconoce si esa mutación también afecta la severidad de los síntomas en las personas contagiadas.
También se desconoce si esa mutación aumenta la mortalidad en los contagiados, mientras que los propios expertos argumentaron que se necesitan más estudios para entender el cambio del COVID-19.
Finalmente, investigaciones previas han demostrado que el SARS-CoV-2 está mutando y evolucionando a medida que se adapta a sus huéspedes humanos. La D614G en particular ha sido señalada como especialmente preocupante porque parece estar convirtiéndose en una mutación dominante.
Could the common genetic variation of the #coronavirus allow it to spread more easily between people? Scientists urge caution https://t.co/4eRNuLKol2 @nytimes #Southflorida #Palmbeach #Jupiter
— Scripps Research (@scrippsresearch) June 12, 2020