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Iván Pérez representa, junto a su esposa Lourdes y dos integrantes más, Estanquillo El 32 desde hace casi tres años. Ambos son biólogos, y su interés por informar a la gente respecto a los productos que consumen se ve reflejado en este local.
Antes de abrir Estanquillo El 32 estábamos trabajando en ferias ambientales con distintas cooperativas, como empresas familiares, con el objetivo de hacer más sensibles y conscientes a los consumidores, de tal forma que esto les permitiera ser responsables a la hora de qué y cómo comprar, comenta Iván a Reporte Índigo.
Luego de la tarea que realizaron en las ferias, decidieron seguir impulsando su perspectiva de consumo responsable, pero ahora en un espacio propio, un lugar en el que las puertas estuvieran abiertas para todas aquellas personas dedicadas a vender productos artesanales.
Entre botellas de mezcal y cervezas, Iván agrega que todos sus proveedores están preocupados e interesados en producir y brindarle a la gente cosas distintas a las que puede encontrar en los mercados masivos, como mermeladas, salsas, licores, e incluso camisetas.
En Estanquillo El 32 hay también un menú que va de la mano con un consumo orgánico y responsable. “Quisimos meter alimentos que son parte de la historia de la cocina de este país”, admite Iván respecto a la variedad de tostadas que ofrecen, entre las que destacan las de quelites, hongos, papa con perejil, conejo, guitlacoche y chapulín.
Además de las tostadas, hay tamales hechos por una de sus compañeras, quien los hace pensando en la gente vegana; cacao y café proveniente de Chiapas, Puebla, Oaxaca y Veracruz.
Cada mes, en Estanquillo El 32, ubicado en Enrique González Martínez número 32, en la colonia Santa María la Rivera, se llevan a cabo un aproximado de tres charlas sobre el manejo de áreas verdes y arbolado urbano, o degustaciones de mezcal y cerveza.
