La memoria musical de Enrique Ramil, cantante y compositor español, invita a recorrer las melodías de su infancia, comenzando en los nostálgicos días donde un tocadiscos era el portal que conectaba su hogar con las atemporales creaciones de Agustín Lara, Roberto Cantoral y Armando Manzanero.
Con una mirada cargada de emoción, rememora esos momentos mágicos donde la música llenaba cada rincón de su casa.
“Crecí con esas canciones. Siempre hubo un gramófono que reproducía los vinilos y los acetatos. Los grandes, con fotos gigantes y letras de canciones en un libreto. Hoy en día, casi una rareza, pero para mí, un tesoro invaluable”, comparte Ramil a Reporte Índigo.
Este viaje musical sumerge en el encanto de la nostalgia y la conexión especial que Ramil siente hacia las composiciones clásicas, las cuales ahora podrá interpretar el 16 de marzo con el programa La noche de las canciones perpetuas.
“Después de interpretar ‘Señora’ y ‘Se nos rompió el Amor’ en un talent show en España, fui invitado a la casa del maestro Manuel Alejandro. Fue un encuentro revelador donde pude agradecerle personalmente por la magia que sus composiciones agregaron a mi vida”.
“A veces pienso si a sus herederos les estará gustando o si les falto el respeto al cantar estas canciones. Pero conocer al maestro Manuel Alejandro y luego al hijo de Manzanero me hace creer que estoy haciendo las cosas bien. Me di cuenta de que si lo hago desde el respeto las cosas saldrán bien”, añade.
El repertorio en El Cantoral
Ramil se prepara para rendir homenaje a estas canciones eternas en La noche de las canciones perpetuas en El Cantoral. Es un momento de celebración y gratitud, donde la música une generaciones y trasciende el tiempo.
Además, el cantante anticipa el lanzamiento de un álbum inédito, una colección de canciones que reflejan su evolución artística y personal. Con cada melodía, Ramil busca conectar con su audiencia y transmitir la pasión que lo impulsa.
“Respeto al artista al respetar el texto original, porque hoy en día hay mucha gente que describe lo que canta, pero antiguamente había grandes compositores que escribían para grandes cantantes. Intento ver cómo puedo cantar ‘Soy lo prohibido’, sin versionar a Olga Tañón o a Luis Miguel, sin faltarle al respeto.
“Para mí es muy especial esa noche por dos motivos: uno es que van a estar algunos de los familiares de los autores y otra porque es mi primera fecha con banda e interpretaré algunos de mis singles”, adelanta.
La noche de las canciones perpetuas se realizará el 16 de marzo, en El Cantoral, a las 20:00 horas
En su trayectoria, Ramil ha sido admirador de diversos autores y cantantes como Janette, Rocío Jurado, Rafael, Isabel Pantoja, entre otros. Sin embargo, destaca la influencia del maestro Manuel Alejandro, cuyas composiciones fueron las que más le cautivaron desde sus primeros días.
Uno de los momentos más significativos para Ramil es su conexión con la canción “Soy Rebelde”. Aunque la aprendió de pequeño, fue en la preparación para su concierto de “Noche de las Canciones Perpetuas” donde entendió su verdadero significado, pues, a decir del cantante, habla de su vida.
A pesar de momentos difíciles, el artista enfatiza el amor y cuidado de su familia, contrastando con la temática de la canción.
“Es una canción que en su momento me representó y ahora cuando la canto vuelvo ahí, aunque mi familia me ha tratado con todo el amor del mundo y me cuidaron con las herramientas que tenían en ese momento. Desde fuera sí me sentí muy señalado, que en ningún lugar estás a gusto, pero es verdad que si estuviéramos cómodos en cualquier lugar no nos moveríamos y no iríamos a nuestro sitio”, comparte.
En cuanto a nuevos proyectos, el cantante adelanta la creación de un álbum inédito que verá la luz antes de que finalice el año. Con colaboraciones de destacados artistas y un cuidado especial en el concepto del álbum, Ramil busca ofrecer a su público una experiencia nostálgica y auténtica.
Con una carrera en constante evolución y un amor palpable por la música, Enrique Ramil promete seguir cautivando corazones y dejando una marca imborrable en la escena musical.
Su premio en Viña del Mar
El Festival Internacional de la Canción Viña del Mar brilló con una intensidad única este año, y entre las luces y las melodías, la voz del cantante Enrique Ramil resonó con un mensaje de valentía y resiliencia. Ante miles de personas congregadas en la Quinta Vergara, Ramil compartió las palabras: “No tengas miedo de brillar, nunca”.
Esta edición del festival, celebrada en la costa de Chile, no estuvo exenta de desafíos, con los incendios que amenazaron su realización. Sin embargo, la música triunfó sobre la adversidad, y Ramil se destacó como uno de sus protagonistas destacados.
Para el cantante español, esta edición fue especialmente significativa. No solo cautivó al público con su talento, sino que también se alzó con el premio Gaviota de Plata al Mejor Intérprete en la Competencia Internacional por su emotiva canción “La última vez”, coescrita con Ángela Dávalos y Paty Catú.
Esta composición no solo cuenta su historia personal, sino que también refleja las experiencias compartidas de muchos que han sentido la falta de valoración en sus relaciones.
“Es una canción muy especial, pues además de que quería contar mi historia, refiere que todas y todos hemos estado con alguien que, de repente, le da vergüenza ir contigo de la mano o tienen otra persona que es ‘la oficial’. Hay un momento en el que hay que decir hasta aquí, no te permito esto.
“Lo hemos vivido alguna vez y es duro cuando lo vives de parte de gente que quieres, que te gustaría compartir tu vida y descubres que no hay amor recíproco. Hay una segunda parte que habla de toda la gente que no se rinde y sigue adelante, da igual lo que hayas hecho en el pasado, lo que cuenta es lo que eres, lo que haces”, concluye Ramil.
El objetivo de la música
El cantante y vocal coach Enrique Ramil expresa su inquietud ante el impacto de ciertas letras de reguetón en un público joven y vulnerable. Destaca la importancia de que la música vaya más allá de superficialidades, abogando por canciones que aborden temas profundos y resuenen con autenticidad.
“Hay canciones de reguetón que madre mía, están hablando de poner a la mujer en un lugar que no debería estar nunca, ninguna persona, o que solo hablan de tener carros y de drogarse. ¿Dónde están las canciones de antes que tenían una historia, un planteamiento, un nudo y un desenlace?
“Tampoco te digo que vayas a escribir coplas o las que no repetían el coro, pero tampoco canciones que solo digan barbaridades. Me da mucha tristeza”, expresa.
