La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Tecnológico de Monterrey se encuentran entre las cinco mejores universidades de América Latina y las dos mejores de México de acuerdo con el QS University Rankings 2020.
A nivel Latinoamérica, la Universidad de Buenos Aires es la mejor posicionada en el lugar 74, seguida por la UNAM en el 103, la Universidad de Sao Paulo en el 116, la Pontificia Universidad Católica de Chile en el 127 y el Tecnológico de Monterrey en la posición 158.
Este año, la UNAM avanzó 10 sitios al pasar del 113 al 103, siendo la institución latinoamericana que goza de mejor prestigio. En cuatro años, ascendió 72 posiciones.
El estudio de la empresa inglesa señala que, de continuar su tendencia ascendente, la UNAM se colocaría pronto en el Top 100 global.
El doctor Imanol Ordorika Sacristán, director general de la Dirección General de Evaluación Institucional (DGEI) de la UNAM, explica que existen varios rankings internacionales que capturan la atención, pero que los especialistas han sido bastante críticos de ellos por sus inconsistencias, por su tendencia muy fuerte a favorecer a las universidades de habla inglesa y en especial a las de EU.
“El QS está reflejando algo que es una tendencia general de la Universidad, no habría que decir ‘a la UNAM le fue muy bien en el ranking’, sino ‘la UNAM está haciendo muy bien su trabajo y dentro de otros espacios, esto se ve reflejado en algunos de los rankings, en particular en este’, en donde aparece claramente en un muy buen lugar”, asegura el doctor Ordorika.
Pero más allá del lugar conseguido, el director general de la DGEI enfatiza que lo importante es que esta institución está teniendo un reconocimiento y un prestigio cada vez mayor en el ámbito internacional.
El QS University Rankings 2020 hace una serie de encuestas internacionales entre empleadores y académicos, luego mide a partir de bases internacionales el número de publicaciones y de citas que tiene cada universidad. Después le solicita a las instituciones información sobre el número de estudiantes y profesores de tiempo completo, los que tienen doctorados, y la matrícula de profesores y estudiantes internacionales.
Por ello, dice, es fundamental que las políticas públicas hacia la educación superior sigan apoyando a la UNAM para poder mantener ese buen trabajo que se está desarrollando, pero también es una oportunidad para las otras universidades públicas del país, para que tengan más impacto y visibilidad internacional, dado que están haciendo un buen trabajo.
“El compromiso de los estudiantes, de los profesores, de los investigadores y de sus trabajadores es un ejemplo para tener una universidad de las mejores del mundo, además pública. Es algo que construimos con un enorme esfuerzo desde hace décadas y que es necesario conseguir los recursos del gobierno federal para poderlo mantener, para poder seguir figurando dentro de este grupo de grandes universidades que tienen una enorme calidad, eso vale la pena plantear, mantener y extender”, opina Ordorika.
El Tec también saca la casta por las universidades de México
En 9 años, el Tecnológico de Monterrey escaló más de 200 posiciones, para pasar del lugar 387 hasta el Top 160, ya que ocupa el puesto 158 dentro del QS World University Ranking 2020. Además se encuentra entre las 30 mejores universidades privadas en el mundo.
Para Neil Hernández Gress, vicerrector asociado de investigación del Tec de Monterrey, el lugar ocupado en el QS representa un resultado, que aunque no trabajan para aparecer en los rankings, si muestra que el trabajo que está haciendo está a la vanguardia.
A diferencia de lo que muchos creerían sobre que se trata de una universidad que no está al alcance de todos, Hernández Gress comenta que la mayoría de sus estudiantes son becados y que existen múltiples planes de financiamiento y de reconocimiento a la excelencia académica.
Para Salvador Alva, presidente del Tec de Monterrey, este avance progresivo es un reflejo del trabajo colaborativo de toda la comunidad y resultado de que la institución se ha sabido transformar.
“Para abordar los nuevos retos del mundo y mantenernos en constante innovación, es necesario reenfocar constantemente nuestra estrategia, siempre tomando como base lo que hemos construido en más de 75 años”, señala Alva.
Además dijo que son conscientes de que las universidades son motores que contribuyen al desarrollo económico, social, político y ambiental del mundo.