En la mente de México

El cerebro es la “máquina” más compleja. Incluso todas las investigaciones que se han realizado resultan insuficientes para entender por completo cómo funciona la mente.

Se dice que “cada cabeza es un mundo”, y precisamente esa es una de las excusas más comunes para no hablar de la salud mental.

Y es que ésta no se reduce a estar “loco”, senil o padecer algún trastorno. Esta semana la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que “la salud mental es parte integral de la salud; tanto es así que no hay salud sin salud mental”.

El organismo reveló que actualmente 600 millones de personas sufren de alguna enfermedad mental en el mundo, por lo que se declaró –finalmente– a la salud mental como un importante problema de salud global y una pieza clave en la salud física. 

Después de semejante anuncio se espera que autoridades, organismos y la sociedad se centren en este rubro, tal como ocurre con epidemias o virus.

Y es que tan solo en México, el Alzheimer –enfermedad neurodegenerativa– figura entre las 10 principales causas de muerte; y de acuerdo al Centro de Investigaciones y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), 350 mil personas padecen Alzheimer en el país. 

Y esto es sólo el comienzo, pues se estima que para 2050 la cantidad de pacientes con Alzheimer podría ser hasta seis veces mayor, superando los 2.2 millones de personas, según 

información publicada por el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía (INN).

Por otro lado, en 2010 uno de cada 100 mexicanos padecía esquizofrenia, 1.6 por ciento de la población tenía trastorno bipolar y 7 por ciento sufría de depresión. Sin embargo, más del 50 por ciento no tenía el diagnóstico –ni tratamiento– adecuado, de acuerdo con el Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente (INPRF).

La situación es aún más grave en México si se toma en cuenta que solo hay alrededor de 2 mil 400 psiquiatras, lo que equivale a 2.7 especialistas por cada 100 mil habitantes de la República, de acuerdo al laboratorio Eli Lilly and Company.

Refugiados en riesgo mental

En tiempos de crisis, como los que viven los migrantes y refugiados actualmente en países de Europa, así como en la propia frontera de México con Estados Unidos, la atención hacia la salud mental llega en el momento oportuno, ya que los refugiados –y migrantes– requieren observación especial. La OMS indica que las personas que son forzadas a migrar tienen entre 50 y 100 por ciento más riesgo de desarrollar algún tipo de trastorno mental.

La locura no se ‘hereda’

De acuerdo a los resultados de años de estudios a cargo del Medical Research Council (MRC), en Reino Unido, se determinó que las enfermedades mentales –en la mayoría de los casos– son causadas por eventos o experiencias en la vida, y no por factores genéticos (y hereditarios).

Entre las experiencias traumáticas que causan este tipo de trastornos destacan crisis sociales ,como la falta de empleo, y distintos tipos de abuso durante la infancia.

Hasta la fecha, gran parte de los investigadores se han enfocado en buscar genes que aumenten la susceptabilidad  a padecer algún trastorno mental, mientras que los especialistas en psicología alegan que la depresión y ansiedad –así como eventos traumáticos en la vida y el medio ambiente– podrían ser aún más determinantes en el aumento del riesgo.

“Cada acción, cada emoción que se haya tenido afecta al cerebro, por lo que tener un pedazo de la investigación científica diciendo que el cerebro está involucrado en la respuesta emocional a las experiencias de vida no significa avance para nuestro entendimiento”, alega Peter Kinderman, profesor de Psicología Clínica en la Universidad de Liverpool, en entrevista con BBC Radio.

Además, la salud mental está intrínsecamente ligada al intento de suicidio, Kinderman señala que cuando aumentan las tasas de desempleo en alguna localidad, aumentan los casos de suicidio.

En México, la tasa de suicidios entre el 2000 y 2013 registró un aumento, y pasó de 3.5 a 4.9 casos por cada 100 mil habitantes, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

De acuerdo al INEGI, el suicidio es la décimo cuarta causa de muerte en el país.