“Soy un cineasta independiente y siempre seré un cineasta independiente, y los cineastas independientes siempre estamos en búsqueda de financiamiento, porque nuestro trabajo y visión no siempre coinciden con las películas de estudio”, expresa Spike Lee en la descripción de la campaña de Kickstarter que comenzó para recaudar los fondos de su próxima cinta. Pero muchos no estuvieron de acuerdo.
La campaña ofrece recompensas que para algunos son invaluables: objetos de la colección personal de Spike Lee autografiados, tuits de agradecimiento desde su cuenta personal e incluso una cena y una invitación para ir a un partido de los Knicks –en primera fila– con el creador de “Malcolm X”. Sus opositores piensan que un intercambio tan irresistible es injusto para los artistas pequeños, que son apartados de la página principal del sitio por proyectos como el de Lee y que quedan en riesgo de no llegar a su meta.
Kickstarter, que ha recibido críticas por no dar suficiente apoyo a iniciativas relacionadas con la ciencia, salió a la defensa del también productor en una entrada de su blog, en la que hicieron referencia a situaciones similares –como la de “Veronica Mars” y Zach Braff– y describieron los beneficios que tienen las campañas masivas para las menos populares.
De acuerdo al sitio, 47 por ciento de quienes han apoyado el proyecto son donadores nuevos, y los casos anteriores atrajeron usuarios primerizos que, desde entonces, han dado más de un millón de dólares a causas distintas. Quienes repiten representan más del 59 por ciento del dinero recaudado en la red social, y cada día más de 2 mil usuarios se convierten en patrocinadores por segunda vez.
La campaña de Spike Lee superó la meta de un millón 250 mil dólares una semana antes de la fecha límite que tenía para lograrlo.
