Numerosos programas de telerrealidad e incluso testimonios que circulan por internet cuentan un hecho que mujeres que han tenido hijos se niegan a creer: mujeres que se enteran que serán madres al momento en el que se presentan las primeras contracciones para dar a luz.
Aunque todos los embarazos sean diferentes generalmente estos presentan una u otra característica en común como náuseas, mareos y ausencia de menstruación.
Sin embargo, varias madres aseguran que el vientre jamás les creció, que tuvieron su periodo como siempre y que no presentaron ningún síntoma.
Esta condición aunque se considere rara o una falsedad tiene un nombre: embarazo críptico y sucede más a menudo de lo que imaginamos.
Ayer despues de 4 meses tube la sufiencente fuerza para compartir que he sido mama,cosa que me cuesta asimilar a dia de hoy,ya que fue todo de 1dia para otro literalmente,embarazo criptico para todos lo que me preguntan y si es cierto y si pasa y si no sabia que estaba embatazada
— rebecaviera (@rebecaaavs) October 3, 2020
Embarazo críptico, un padecimiento increíblemente real
Este tipo de embarazos ocurren cuando los métodos de diagnóstico habituales; pruebas de orina y sangre fallan, también cuando hay ausencia de síntomas.
Mujeres irregulares a quienes les ha ocurrido esto aseguran que pese a que su periodo se haya atrasado incluso por meses, al realizarse pruebas estas salen negativas.
Otra de las causas por las que una gestación pasa inadvertida se debe a que los síntomas son confundidos con cuadros de indigestión o padecimientos como estreñimiento o fatiga crónica.
Este tipo de embarazo es más frecuentemente padecido por mujeres con menstruaciones muy irregulares, aquellas que padecen el Síndrome de ovario poliquístico, menopausia precoz o realizan deportes de alto impacto.
También el fallo de métodos anticonceptivos que se consideran altamente seguros y el embarazo durante la lactancia, cuando algunas mujeres presentan amenorrea son algunas de las situaciones que impiden que la mujer esté prevenida ante un embarazo.
Malos diagnósticos médicos también pueden evitar que la mujer relacione los síntomas padecidos, en caso de que los presente, con su estado.
Monserrat, una mujer residente de la Ciudad de México, explica que pese a que fue operada de la vesícula y le realizaron exámenes dude todo tipo como ultrasonidos, exámenes de sangre y orina y rayos X, no se dio cuenta de su estado.
“La operación fue en septiembre y después de eso yo seguía con vómitos y dolor. Mi mamá me llevo a un ultrasonido pensando que probablemente tenía unas tijeras adentro. Y ¡oh sorpresa! No eran tijeras, era un bebé de 7 meses”, relata la joven madre.
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Que una mujer no esté consciente de que puede estar embarazada trae múltiples consecuencias, como la falta de control prenatal, la suspensión del consumo de sustancias nocivas para el feto como alcohol, tabaco o drogas.
Otros de los problemas derivados es el riesgo de que el bebé padezca espina bífida debido a la falta de consumo de ácido fólico y otros problemas asociados a defectos en el tubo neural.
Debido a la falta de control prenatal la madre no podrá estar prevenida ante anomalías en los cromosomas, malformaciones fetales y otros defectos congénitos.
La muerte fetal debido a la falta de cuidados adecuados es otra de las consecuencias de este tipo de embarazos.
Así lo cuenta María, quien llegó a urgencias debido a un fuerte dolor de estómago, y aunque primero le dijeron que era un tumor, momentos después un médico le reveló que estaba embarazada.
“Cuando llegué a ecografía el médico me preguntó que donde tenía guardado el bebé, le contesté ‘¿cual bebé?’ ‘Tienes 28 semanas de embarazo’ me desmayé al instante, estaba en trabajo de parto. El bebé no sobrevivió, pero es definitivamente posible; yo tuve mis períodos puntuales, nunca sentí movimientos y ni subí de peso”, comenta María.
Padecimientos de las mujeres embarazadas como diabetes gestacional, preeclampsia, síndrome de HELLP, problemas con la placenta, entre otras complicaciones, no podrían remediarse a tiempo y se comprometería la vida de la madre.
Aunque la incidencia de este tipo de embarazos no es frecuente, tampoco es rara pues se da en una de cada 2 mil 500 gestaciones.
El factor psicológico influye un papel importante en los embarazos crípticos, pues la falta de síntomas podría estar asociada a la negación del estado por parte de la gestarte.
