Resulta que en la pintura “El grito” de Edvard Munch el personaje no estaba escandalizado, sino algo muy diferente a lo que por muchos años pensamos era el verdadero sentido de la obra de arte.
Expertos del Museo Británico encontraron una litografía con la inscripción “Sentí un gran grito en toda la naturaleza”, por lo cual dedujeron que la persona escucha el grito y se cubre los oídos.
La pintura creada en 1893 por el artista noruego deja ver en primera instancia a una persona desencajada con la boca abierta y las manos en la cabeza, muestran que realmente se estaba tapando los oídos.
Excited for #TheScream to be at the @britishmuseum in the #MunchExhibition ? #TuesdayThoughts pic.twitter.com/XuWWMHxEBi
— Museums and Galleries Collection (@mandgcollection) January 9, 2019
De acuerdo a los curadores, Munch plasmó la ansiedad y desesperación de un sujeto al presenciar una tarde en Oslo con las nubes y el cielo teñidos de rojo.
Los expertos en arte del museo londinense encontraron tal nuevo significado durante una curaduría a las obras del pintor noruego para montar una exposición sobre su legado artístico, además de su famosa pintura “El grito”.