El talento del compositor Antonio Juan-Marcos ‘inundará’ París con ‘Mi vida con la ola’
Antonio Juan-Marcos estrenará en Francia su obra ‘Mi vida con la ola’, basada en el cuento homónimo de Octavio Paz. El compositor mexicano describe la pieza y explica todo el trabajo que hizo detrás
José Pablo Espíndola“Cuando dejé aquel mar, una ola se adelantó entre todas. Era esbelta y ligera. A pesar de los gritos de las otras, que la detenían por el vestido flotante, se colgó de mi brazo y se fue conmigo, saltando”, así inicia “Mi vida con la ola”, de Octavio Paz, cuento que atrapó al compositor Antonio Juan-Marcos.
“Tenía desde hace tiempo este cuento en el radar, por así decirlo, desde la adolescencia. Muy pronto me sedujeron los poemas y los ensayos de Octavio Paz, siempre tenía el interés de leer más. Fue después de haberme adentrado en sus poemas y en sus ensayos que descubrí sus cuentos, que tampoco son tantos, en comparación con sus poemas, pero son muy bellos”, asegura.
Juan-Marcos estrenará hoy en París, Francia, dentro del Festival Claude Helffer en Vitry-sur-Seine, un monodrama para barítono y ensamble de seis músicos inspirado en este cuento de Paz. La pieza, que también se llama “Mi vida con la ola”, fue comisionada por el Ensamble ALMAVIVA y el Ministerio de Cultura de Francia.
El interés del compositor de musicalizar este cuento nació por lo surrealista que le parecía el que una ola fuera un personaje y más por la idea de contar una historia de amor imposible a través de un amor imposible entre un hombre y una ola.
“Fue el gusto por el cuento y el gusto por imaginar diferentes maneras de musicalizar los estados de la ola, porque esta se transforma de muchas formas a lo largo del cuento. Pase del estado normal, de ser una ola, al estado donde se evapora y luego llueve y cae sobre su ser amada y abarca toda la casa y luego se congela, etcétera. Todas estas transformaciones, que también van de la mano con las transformaciones de la vida de pareja, me sugerían sonoridades”, explica.
Si bien su deseo era hallar una sonoridad para el agua plena que abarca la casa de su ser amado, otra para el agua que se evapora, otra para la lluvia y otra para el agua hecha hielo, se dio cuenta que no era lo principal que tenía que hacer para contar esta historia.
El compositor descubrió que lo trascendental era mostrar la historia de la relación de pareja, más allá de la plasticidad de la ola que cambia de forma, que es muy bonito, lúdico y poético, lo profundo de este cuento no es lo surrealista, sino lo humano.
“Lo completamente realista que es el escribir una historia de amor que, como muchas, pasa de manera inesperada. Un personaje que se mete al mar y que nunca se imagina que se va a encontrar una ola, sale con una relación y pasa de momentos esperanzadores, donde todo parece posible y todas las posibilidades de un futuro feliz se abren, a una relación fragmentada por completo”, comparte el compositor.
A pesar de que la idea de Octavio Paz es surrealista, el contenido es completamente realista, es muy humano, y ese es el punto que tenía que transmitir Antonio.
La pieza final de Antonio Juan-Marcos
Antonio Juan-Marcos compuso un monodrama en siete movimientos, para ello seleccionó siete fragmentos del cuento que le parecían los más importantes dentro la historia, porque hacían avanzar la acción dramática.
“Digamos que quien lleva la narración es el barítono, el cantante, en este caso Alejandro Gabor, quien es un cantante argentino que vive en Francia. Me concentré mucho en la escritura melódica del cantante para que tuviera una carga expresiva que nos hiciera sentir la historia, que nos hiciera vivir la historia.
“También me enfoqué en la claridad de dicción, que lo que cantase, por la manera en la que están escritas las melodías, la manera en la que musicalizó el texto, nos dijera muy claramente las palabras para entender la historia, porque, a veces, hay escrituras melódicas que son muy melismáticas o con muchas figuraciones, con muchas ornamentaciones de notas, y perdemos un poco el hilo de la palabra o del texto que queremos escuchar”, resalta el compositor.
El Ensamble ALMAVIVA, conformado por latinos y franceses, será el encargado de tocar la pieza. El objetivo es que el público se quede con la experiencia de un evento que va más allá de un concierto, con la experiencia de haber asistido a una historia hecha música.
A través de una puesta escena y de imágenes y videos la producción buscará cumplir su objetivo.
Una relación necesaria
Al compositor Antonio Juan-Marcos la relación texto-música siempre le ha interesado, por ejemplo, antes de este monodrama, ya había musicalizado poemas de Octavio Paz, la última canción la escribí para contratenor y orquesta, se llama ‘Amanece’ y fue encargada por la Filarmónica de la Ciudad de México y se tocó en 2014 para celebrar el centenario del natalicio de Octavio Paz.
“Hay como una historia con sus letras y sin duda va a seguir, porque la literatura siempre me ha acompañado, muchos leemos porque es una forma de saber que no estamos solos, por eso siempre tengo un libro en la mano”, asegura.
En conexión
FB: Antonio Juan-Marcos / Composer
Youtube: Antonio Juan-Marcos Cavazos Compositor