El siguiente paso para el trabajo de Conapred
Este organismo, creado en 2003, está a la espera de la elección de su próxima directora, una mujer de origen indígena. Especialistas concuerdan que la elegida deberá fortalecer las tareas que el Consejo ha llevado a cabo de manera ejemplar en los últimos años
Fernanda MuñozUno de los organismos más importantes en el país, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), sigue caminando a oscuras, sin una cabeza que lo represente y con una presunta posibilidad de desaparecer.
Desde su creación a inicios del siglo XXI, en 2003, el Conapred no había enfrentado un escenario como el actual. Hace sólo una semana, su entonces directora Mónica Maccise dimitió de su cargo y el presidente Andrés Manuel López Obrador sugirió desaparecerlo y dejar en manos de la Secretaría de Gobernación esa labor.
Sin embargo, y a pesar de los hechos, se sigue buscando que el Consejo demuestre la fortaleza con la que siempre luchó en favor de las y los mexicanos.
Emilienne De León, activista feminista y miembro del grupo social La Cuatro D, comparte que, desde sus inicios, el Consejo no había sido señalado de otra manera más que como un órgano ejemplar, el cual siempre intentó realizar su tarea de la mejor forma, erradicando el racismo y la discriminación del país.
Para ella, Conapred hizo uno de los trabajos más difíciles en el país, logró que se hablara y se reconociera que distintos grupos sociales sufrían de discriminación, algo que por años se ocultó e ignoró.
Asimismo, Ricardo Uvalle Berrones, doctor en Administración Pública, añade que, a raíz de haberse promulgado la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, Conapred siempre se dedicó a erradicar las prácticas racistas, excluyentes y clasistas que lastimaron, y lastiman, a los más vulnerables
Tomando en cuenta la labor que ejerció y sigue desempeñando el Conapred, el académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), menciona que su desaparición y falta de atención sería una de las decisiones más graves, sobre todo en tiempos de pandemia mundial.
“Desde el punto de vista gubernamental, sería un error su desaparición, no hay ningún motivo justificado para eso (…) Se ha mencionado que sería la Secretaría de Gobernación la que se encargaría; sin embargo, esta dependencia ya está cargada de muchos compromisos, y una oficina más en línea va a generar un desastre administrativo y un daño irreparable para la sociedad”, destaca Uvalle Berrones.
La próxima representante de Conapred
Luego de la dimisión de la politóloga Mónica Maccise, y de las propuestas de desaparición del Conapred, una de las vías para su permanencia fue integrar a una mujer indígena a la dirección.
Aunque esta petición fue solicitada por el jefe de Estado, la propuesta ha sido analizada en los últimos días, ya que se busca que quien tome las riendas del organismo ayude a potencializar las tareas del mismo.
Hasta el momento, son seis mujeres originarias las que han alzado la mano para dirigir al Consejo: Marcelina Bautista, Fátima Gamboa Estrella, Amaranta Gómez Regalado, Larisa Ortiz Quintero, Zenaida Pérez Gutiérrez y María Sánchez Álvarez, todas ellas defensoras de los pueblos indígenas.
Para la feminista Emilienne De León, el que una mujer de cultura originaria represente al Conapred es una gran decisión, tomando en cuenta que cada una de ellas ha vivido y reconoce desde diferentes puntos cómo es sentirse discriminado y señalado por la sociedad sólo por la descendencia o las apariencias.
“Cualquiera de ellas estoy segura que haría un papel muy importante, pondría otra vez al frente a nuestros pueblos originarios, a esos que han sido discriminados y han hecho a un lado”, rescata Emilienne.
Y aunque de igual manera el doctor Ricardo Uvalle Berrones reconoce el papel de las candidatas, agrega que es importante voltear a ver a los profesionales en el tema de discriminación, racismo y clasismo para representar al Consejo.
“Recordemos que México está suscrito a tratados internacionales que requieren del conocimiento y la pericia en términos jurídicos, políticos e institucionales de este tema tan delicado. El director o directora debe ser un profesional, esa sería una garantía de que el trabajo se va a desarrollar de un modo objetivo e imparcial”, comparte Uvalle Berrones.
De acuerdo con el doctor, si en algún punto el Conapred llegara a realizar una falta o no cumpliera con sus labores luego de nombrar a su nueva directora, es esencial que se le haga una evaluación constante para comprobar que se está haciendo un trabajo puntual y con resultados efectivos.