El rock de Manchester vive
Sus cuatro caras están desperdigadas por todo el centro de Manchester. Una señal clara de que Everything Everything son los actuales hijos pródigos de esta industriosa urbe y herederos de una de las ciudades con el linaje musical más influyente de los últimos 30 años.
Los pósters de la banda son a propósito de que "Arc", su segundo disco –en mi opinión el primer gran álbum de 2013–, ha llegado.
Las trece canciones del álbum están repletas de pasajes memorables y nuevas maneras de estructurar un hit. Verso/coro/verso no es el común denominador de esta innovadora banda.
Esteban Castro
Sus cuatro caras están desperdigadas por todo el centro de Manchester. Una señal clara de que Everything Everything son los actuales hijos pródigos de esta industriosa urbe y herederos de una de las ciudades con el linaje musical más influyente de los últimos 30 años.
Los pósters de la banda son a propósito de que “Arc”, su segundo disco –en mi opinión el primer gran álbum de 2013–, ha llegado.
Las trece canciones del álbum están repletas de pasajes memorables y nuevas maneras de estructurar un hit. Verso/coro/verso no es el común denominador de esta innovadora banda.
“Cough, Cough”, la apocalíptica canción que abre el disco, combina ritmos militares con una letra paranoica y cánticos que no estarían fuera de lugar en un single de Rihanna. El MVP del track es el baterista Michael Spearman, cuyos ritmos casi tribales son lo que hacen sonar a esta canción de forma tan especial.
Es evidente que Jonathan Higgs, vocalista de la banda, le ha dado buen uso a su licenciatura en Música Popular que obtuvo en la Universidad de Salford, el suburbio de Manchester que Morrissey mitificó. “Arc” es Math Rock con esteroides.
Cuando realmente tienes problemas para encontrar una canción favorita ante la variedad de opciones –la guitarra oriental de “Radiant”, la épica y orquestral “Duet”– sabes que tienes un gran disco en tus manos.
“Kemosabe”, el actual sencillo del disco, es otra candidata. Higgs, cuya voz puede ir desde un persistente staccato hasta un sublime falsetto similar al de Guy Garvey de Elbow, canta en este track sobre guerra, conflicto y soledad a través de un synth incesante que no deja que la canción pierda su velocidad, la cual culmina en el intenso grito en el que el vocalista confiesa “I’ve Lost My Way”.
El verdadero triunfo de “Arc” es poder combinar letras cerebrales con melodías y ritmos que apelan directamente a las emociones.
Manchester puede dormir tranquila. En Everything Everything tienen a una banda capaz de mantener el “Manc Rock” en el mejor nivel.
Arc
Everything Everything
[2013]
170 pesos en iTunes
bit.ly/arcalbum