Él es Fabrizzio Ulloa Cornejo, el bailarín mexicano ganador del prestigioso Prix de Lausanne 2023

Fabrizzio Ulloa Cornejo, el bailarín mexicano  ganador del Prix de Lausanne 2023, considera que en México falta promocionar más la danza clásica
Abida Ventura Abida Ventura Publicado el
Comparte esta nota

Fabrizzio Ulloa Cornejo es un joven de Monterrey que a sus 16 años se está ganando su lugar en las mejores escuelas de danza clásica en el mundo.  Actualmente estudiante en la Ballettschule Theater Basel en Suiza, se alzó hace unas semanas con el primer lugar del prestigioso Prix de Lausanne 2023, concurso para jóvenes bailarines que aspiran a convertirse en profesionales y que ha sido el trampolín para decenas de estrellas de la danza, como el reconocido bailarín cubano Carlos Acosta.

“No puedo creer que pasó, la verdad. Estoy muy feliz de que todo este trabajo y este tiempo fuera de casa funcionó; me llegaron muchos mensajes de gente de México diciendo que esto los inspiró y eso me hace sentir muy bien porque algo que deseo es que en México pueda haber más oportunidad para el ballet porque tenemos a mucha gente talentosa”, dice en entrevista con Reporte Índigo el bailarín en formación, ahora de visita con su familia en Monterrey.

Egresado de la Escuela Superior de Música y Danza de Monterrey,  donde estudió desde los 10 años, Fabrizzio dice estar cumpliendo un sueño y cosechando los resultados de una travesía que comenzó desde muy pequeño, gracias al impulso de su madre que desde los tres años lo llevó a clases de piano y lo acompañó en su recorrido de experimentar diversas expresiones artísticas, hasta que Billy Elliot le reveló el ballet. Una disciplina que en México sigue considerándose tabú para los niños y jóvenes debido a la limitada promoción de las artes y la cultura.

“Lo que falta es un poco más de exposición porque creo que todavía hay mucho estigma y mucho tabú de que un bailarín hombre haga ballet, es algo que va mejorando mucho, pero no toma la misma importancia a que alguien gane un mundial de fútbol”
Fabrizzio Ulloa CornejoBailarín en formación

Además, promocionar las expresiones artísticas como el ballet entre los niños es vital porque su aprendizaje inicia desde los primeros años. “El ballet es algo difícil, tienes que empezar desde muy pequeño, sino tienes que ser increíblemente talentoso para poder llegar; creo que la gente debe saber que sí se puede y que por ser mexicanos no tenemos barreras, que es algo que también siempre está en la mente”, añade.

En su caso, además del impulso de su familia, es su talento el que le ha ido abriendo las puertas.

Conquistando Suiza

La aventura en Suiza, recuerda, comenzó hace dos años, gracias a una beca que se ganó en una competencia en línea del Youth America Grand Prix (YAGP); dos años antes había ganado el mismo concurso, esa vez realizado en Orizaba, Veracruz, pero no pudo irse porque apenas tenía 12 años. Sin embargo, la segunda oportunidad fue una confirmación del camino que debía seguir, aunque eso significara estar lejos de su familia. “Era un sueño, yo aspiraba todos los días a vivir en Europa y estar en una escuela con una beca”, dice.

Sumergido en un ambiente internacional, en un método de enseñanza diferente e impulsado principalmente por su profesor François Petit, Fabrizzio Ulloa Cornejo se ha presentado junto a la compañía de su escuela en el Teatro de Basilea, donde cada verano los estudiantes de la Ballettschule Theater Basel tienen la oportunidad de mostrar su talento y donde cada fin de año presentan el Cascanueces.

En la gala de verano de este año el mexicano ejecutará un pasodoble junto a su compañera Alecsia Lazarescu, también ganadora de una beca en el Prix de Lausanne 2023. “Estamos muy emocionados, aunque hay que hacer mucho trabajo porque es un solo que lo bailan dos personas juntas,  tenemos que estar en sincronización; estoy feliz de aceptar el reto porque normalmente esto lo hacen bailarines más grandes en una compañía porque es un poco largo y se baila sin parar, pero estoy contento de que creyeran en mi talento y en el de mi compañera”, comparte.

Además, gracias al Prix de Lausanne, el bailarín tiene ahora la oportunidad de elegir entre 30 escuelas de danza altamente reconocidas en el mundo para hacer prácticas directamente en una de esas compañías, entre ellas la Escuela de Danza de la Ópera Nacional de París, la English National Ballet School de Londres o el San Francisco Ballet School. “Todavía tengo que hacer la elección, no estoy seguro, pero tengo algunas ideas”, dice esta joven promesa, quien confiesa que su mayor sueño es bailar en la Royal Ballet de Londres.

“Siempre he querido estar ahí, he visto los ballets y los bailarines que son de ahí y la verdad es que, si alguna vez puedo llegar a bailar en la Ópera Real de Londres, sería como el momento en que yo digo ya, ya la hice en la vida”, comparte.

Talento innato

Desde la sala de su hogar en Monterrey, unas horas después de aterrizar de un vuelo de Suiza y de abrazar a su familia y mascotas tras un año de ausencia, Ulloa Cornejo recuerda que todo este trayecto comenzó cuando su madre lo inscribió en clases de piano a los 3 años.  “Me llevó a clases de piano porque ya no podía estar en la casa, era muy hiperactivo, me trepaba en todos lados y hacía maromas, también me encantaba escuchar música desde pequeño,  de cualquier tipo, pero sobre todo la clásica, aprendí a tocar un poco el piano y después quise ver qué más había y mi madre me inscribió en teatro musical”, relata.

Y fue justo el teatro musical que lo encarriló al ballet, inspirado en gran parte en el personaje de Billy Elliot: “Yo no sabía nada de ballet,  entonces mi mamá buscó y me llevó a la Escuela Superior aquí; entré y descubrí algo que nunca había sentido en los talones, cuando bailaba ballet era algo que me hacía sentir como en mí mismo, me hacía sentir bien, solo fluía, entonces al final decidí que quería quedarme en el ballet clásico”.

En esa escuela, dice, sus maestros siempre elogiaron su talento innato y lo animaron a trabajar en él. “Me decían que si era lo que más me gustaba que lo persiguiera y viera hasta dónde podía trabajar para llegar a mi límite, y eso es lo que estoy haciendo ahora”, dice.

Talento mexicano

  • Tiene 16 años y es originario de Monterrey
  • Estudió piano desde los 3 años e incursionó en el teatro musical hasta que descubrió la magia del ballet
  • Estudió en la Escuela Superior de Música y Danza de Monterrey
  • Desde agosto de 2021 es estudiante becado en la Ballettschule Theater Basel, en Suiza
  • En febrero ganó el Premio al mejor candidato, representando a la escuela suiza, en el prestigioso Prix de Lausanne 2023

El Prix de Lausanne

A diferencia de otros, el Prix de Lausanne no está dirigido a profesionales, sino a estudiantes que al ser galardonados pueden elegir entre 30 escuelas asociadas de todo el mundo. El premio fue instaurado en 1973 y lo han ganado estrellas de la danza, como la italiana Alessandra Ferri, el cubano Carlos Acosta, el alemán Friedemann Vogel, entre otros.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil