Las personas que padecen dislexia suelen presentar dificultades para la lectura.
La décima Clasificación Internacional de Enfermedades (ICD-10, en inglés) que establece la Organización Mundial de la Salud (OMS), define a la dislexia como un “trastorno específico de la lectura”, en el que se suelen ver “(…) afectadas la capacidad de comprensión de la lectura, el reconocimiento de las palabras leídas, la capacidad de leer en voz alta y el rendimiento en actividades que requieren de leer”.
Consciente de ello y de las distorsiones en las palabras que caracterizan los déficits en la lectura de personas con dislexia, la diseñadora alemana Christian Boer –quien padece dislexia– desarrolló una tipografía especial bautizada como “Dyslexie”, que actualmente se exhibe en la Bienal de Diseño de Estambul.
Se trata de una nueva tipografía, “revolucionaria, diseñada para simplificar la vida de quienes tienen dislexia”, señala su sitio Web oficial.
Y es que “cuando están leyendo, las personas con dislexia suelen cambiar, rotar y reproducir letras en su mente sin darse cuenta”, explicó Boer al diario británico The Guardian.
Y agregó que “las tipografías tradicionales empeoran esto, porque basan algunos diseños de letras en los demás, creando inadvertidamente ‘letras gemelas’ para personas con dislexia”.
Con Dyslexie, el peso de las letras se carga en la parte inferior, como si se ejerciera presión sobre éstas. Esto para evitar que las letras sean volteadas al revés. Para evitar confusiones en aquellas letras similares –p, b, q, por ejemplo–, Boer deformó la estética de cada una de éstas, con inclinaciones, aperturas, proporciones y altura, de tal manera que se distingan entre sí.
“La tipografía Dyslexie es la perfecta combinación de forma y función: óptima comodidad de lectura con una gran apariencia”, describe el sitio.