Don Ramón: cuánto le debía al señor Barriga de renta, polémica de drogas y un final triste

Antes de su fallecimiento, Carlos Villagrán visitó a su compañero de El chavo del 8 y mantuvo una conversación que quedó en el recuerdo
Carlos Ramírez Carlos Ramírez Publicado el
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Don Ramón, personaje memorable del actor Ramón Valdés, cruzó fronteras más allá de México por su protagonismo en la serie El Chavo del 8, de Roberto Gómez Bolaños; sin embargo, el mayor de la familia Valdés tuvo un final triste que también estuvo rodeado de polémicas.

El mayor de los Valdés

La también llamada Dinastía Valdés contempla a cuatro comediantes emblemáticos que marcaron para siempre el espectáculo en México: Germán, mejor conocido como Tin Tan; Manuel, mejor conocido como El Loco; Ramón, famoso por su papel como Don Ramón en El Chavo del 8 y Antonio, El Ratón.

Pero, Ramón era el mayor de los Valdés aunque el primero en perder la vida fue Tin Tan; y siempre se le consideró como una persona carismática fuera de cámaras que, a veces, podría confundirse con su personalidad de Don Ramón.

De hecho, entre las anécdotas que se tienen sobre Ramón Valdés es que se acercaba a los niños de la calle y les daba regalos o conversaba con ellos.

“Nací niño y sigo siendo chavito: tengo el carácter de niño y los chavitos me entienden bien”, dijo en una ocasión el actor.

Fue su personaje de Don Ramón, o Monchito como le decían desde su infancia, el que lo llevó a la fama mundial pues no es sorpresa encontrar capítulos doblados en chino de El Chavo del 8.

¿Cuánto le debía Don Ramón al señor Barriga de renta?

Una de las dudas que los televidentes tenían sobre su personaje de Don Ramón era sobre cuánto le debía al señor Barriga de renta pues, prácticamente, en cada capítulo se escuchaba el reclamo de pago por parte de Édgar Vivar.

En ese sentido, Nuroa, inmobiliaria mexicana, realizó un cálculo de cuánto era el valor total que Don Ramón le debía al señor Barriga tomando en cuenta que la cantidad de metros cuadrados de la vivienda eran 32, aproximadamente.

Luego, la inmobiliaria determinó que la vecindad del Chavo se hallaba en una zona céntrica de la Ciudad de México, debido a las referencias que hubo durante toda la serie, específicamente cerca de El Zócalo.

Con ello, se estimó el alquiler en los años 70 que costaba unos 63 dólares mensuales y tomando en cuenta que el señor Barriga reclamaba 14 meses de renta, el total de deuda sería de 882 dólares y eso sin intereses.

¿Una deuda impagable?

No obstante, Nuroa detalló que Don Ramón estuvo en varias temporadas, de 1971 a 1979, por lo que hizo el cálculo por los 110 meses que habría vivido escondiéndose de su acreedor y se llegó a la conclusión de que el total de la deuda habría alcanzado los 6 mil 930 dólares.

Aunque hay que recordar que en varios capítulos de la serie observamos que la deuda se fue achicando pues en un episodio el señor Barriga le perdona dos meses porque Don Ramón lo invitó a una fiesta que se organizaba en la vecindad.

También cuando Don Ramón trabaja como ropavejero, el señor Barriga le perdona 5 meses de renta porque encontró una bola de boliche que le interesó.

Además, el personaje de Édgar Vivar le propone reducirle la deuda de la renta a cambio de pintar toda la vecindad; mientras que en otro capítulo le propone enyesar las paredes del patio trasero.

La polémica de las drogas

Fue después de la muerte de Ramón Valdés que su compañera, y amiga, Florinda Meza dio de qué hablar al señalar que su amigo tuvo problemas con las drogas que tuvieron repercusión en su muerte.

Y es que la intérprete de Doña Florinda ofreció una entrevista a un medio brasileño en el que confirmó, hasta ese entonces suposiciones, las adicciones que tenía Ramón Valdéz.

En la entrevista que fue transmitida por el programa Gugu, la actriz de 67 años también habla sobre las diferencias que tuvo con Maria Antonieta de las Nieves La Chilindrina y da un recorrido por la casa que compartió con Roberto Gómez Bolaños Chespirito quien murió el 28 de noviembre de 2014.

Meza relató que durante las grabaciones de El Chavo del 8 Ramón Valdés consumía drogas de manera habitual, así como en otros sketchs realizados en los programas del recordado Chespirito.

Florinda Meza se arrepiente

Las reacciones en redes sociales no se hicieron esperar y Florinda Meza utilizó su cuenta de Twitter para asegurar que no era ella quien debía destapar dicho tema.

“Pues no me correspondía… Quiero aclarar que yo jamás pretendí ensuciar la imagen de mi querido Ramón Valdés. Él era un comediante talentoso y un gran ser humano”, escribió.

Sin embargo, consciente que sus palabras afectaron a sus familiares decidió dirigirse a ellos: “Sin embargo, pido de corazón una disculpa a sus familiares y a los que lo aman, si con mis palabras ofendí su memoria, no fue mi intención”.

Hijos desmienten rumores

Tras esto, el hijo de Ramón Valdés, Esteban, salió a declarar que aceptaba las disculpas, pero que al mismo tiempo pedían a Florinda Meza que se retracte: “Ella se dio cuenta del error que cometió. Se agradecen las disculpas, pero habría que ver si está dispuesta a retractarse”.

Del mismo modo, Esteban Valdés aseguró que la familia de Don Ramón se vio gravemente afectada por estas declaraciones: “Sí fue algo que nos ha causado daño porque la gente tiene una imagen de mi papá… Nosotros como hijos nunca supimos que mi papá usara alguna droga. Decir que era ‘adicto a las drogas’ es algo muy fuerte”.

Un final triste

A pesar de gozar de un gran éxito en la pantalla chica, el ambiente dentro del elenco de El chavo del 8 no era el mejor.

Por ello, en 1979, Ramón Valdés decidió dar un paso al costado de la serie, pues existieron conflictos con Florinda Meza luego que oficializara su relación con Roberto Gómez.

Precisamente, antes de su fallecimiento, Carlos Villagrán, quien interpretaba a Kiko, visitó a su compañero de El chavo del 8 y mantuvo una conversación que quedó en el recuerdo.

El comediante recientemente reveló el contenido de este diálogo y sorprendió contando que Ramón Valdés nunca perdió su sentido del humor hasta cuando sabía que moriría:

“Empecé a llorar, nos dimos un abrazo y me dijo: ‘No llores cachetón. Es más, te espero allá’. Y le digo: ‘¿Con el Señor?’, y me dijo: ‘No te hagas pendejo, allá abajo’”, indicó entre risas.

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