Cuando una pareja cree que que divorciarse es una solución a sus problemas, la mente está en tantas cosas a la vez que a veces la persona no toma en cuenta algunos aspectos a considerarse antes de tomar esta decisión.
Desde el momento en que dos personas deciden contraer matrimonio, una serie de preguntas se estimulan en la cabeza antes de ello para que se efectué una buena unión, pero ¿se hace lo mismo cuando se opta por un divorcio? Tal vez se cree que lo correcto es terminar dicho matrimonio solo que igual alguno de los dos no está tan seguro.
The New York Times describe que a veces existe esta posibilidad cuando la pareja vive una etapa de estrés y nada de humor para preguntares entre sí.
Nancy Colier, una psicoterapeuta en Manhattan, dijo al diario estadounidense es un error no hacerse una serie de cuestionamientos antes del divorcio e incluso recomienda acudir terapia familiar antes de ir con un abogado. Algunas de las preguntas al respecto que el periódico plantea a la gente son las siguientes:
1. ¿Has dejado claro lo que te molesta de la relación?
Esto ante la posibilidad de que una de los dos piensa que se ha expresado ya, pero existe la posibilidad de que la otra persona en verdad no escuchó.
“Si, por ejemplo, crees que tu cónyuge no te considera una prioridad y no pasa tiempo contigo, este comportamiento no podrá cambiar a menos que él o ella estén conscientes de tu inquietud”, describe el diario.
2. ¿Tú y tu cónyuge han dejado claras sus expectativas acerca del papel de cada uno en la relación?
Existe la posibilidad de que haya problemas si uno de los dos espera que el otro se el único que se haga cargo de los ingresos económicos
3. Si hubiera una manera de salvar el matrimonio, ¿cuál sería?
4. ¿Realmente serías más feliz sin tu pareja?
5. ¿Todavía sientes amor?
Aunque la respuesta sea un sí¡, el divorcio puede ser la solución.
6.¿Cuál es tu mayor miedo si se termina la relación?
7. ¿Estás dejando que la posibilidad del divorcio arruine la imagen que tienes de ti mismo?
8. ¿Cómo pueden manejar el divorcio para minimizar el daño a los hijos?
9. ¿Estás preparado para las tensiones económicas que puede conllevar un divorcio?
10. ¿Estoy listo para solucionar los detalles del día a día de los que se hacía cargo mi cónyuge?
11. ¿Cómo evito cometer el mismo error en el futuro?
El problema puede ser uno y no el matrimonio