Sí existen los hombres que tienen 50 años y se siente como de 18, pero también los jóvenes que tienen 20 años y se sienten como de 50.
Este fenómeno que puede hacernos sentir y parecer físicamente mayores se llama “edad metabólica”, un estado representado por la edad real que tiene nuestro organismo de acuerdo con el estilo de vida que llevamos, es decir, con la forma en que descansamos y, principalmente, en cómo nos alimentamos.
Es factible que debido al ritmo de vida puedas pensar que no hay tiempo para alimentarte sanamente o realizar ejercicio constantemente, pero qué pasa con la fiesta, el alcohol y el cigarro ¿para eso si existen tiempos?
“La edad metabólica es la edad que representa nuestro cuerpo de acuerdo a la composición corporal que tenemos, es decir, músculo, grasa corporal y grasa visceral entre nuestros órganos.
Detectar y ser consciente de la edad metabólica que cada uno posee junto con las consecuencias que implica no tener un peso adecuado, ayudará a que las personas puedan generar un diagnóstico oportuno, recobren la salud de su organismo y, en algunos casos, recuperen la edad cronológica real.
Seguro te has preguntado por qué alguien se ve radiante y tú no si las dos tienen la misma edad, lo más probable es que ella lleve una mejor alimentación y hábitos de descanso y por tanto, su edad metabólica sea menor a la tuya, pero no te preocupes, todo tiene solución.
Prevención, el efecto antienvejecimiento
Como en muchos de los problemas de salud, todo está en ti. De acuerdo con información de Abraham, especialista en nutrición, es probable que si tu alimentación es alta en grasas saturadas y no tienes actividad física adecuada, tus órganos estén trabajando de más y por lo tanto representes mayor edad.
Ser consiente de tu edad metabólica puede ser muy sencillo si mantienes un Índice de Masa Corporal (IMC) sano.
Ante estos casos es importante acudir con un nutriólogo o médico general, ya que ellos cuentan con instrumentos de medición especializada que te ayudarán a determinar cuál es el procedimiento que debes tomar.
Sin embargo, si esta opción te resulta complicada, mide constantemente tu IMC en las básculas públicas que hay en la ciudad y si este es mayor a 25 comienza por adquirir una dieta balanceada, realizar ejercicio de forma periódica y a tomar tu descanso con mayor seriedad.
Ser consciente de tus malos hábitos te ayudará a prevenir o revertir los efectos y edad metabólica derivados de una alimentación no adecuada, así como mejorar tu condición y físico y a prevenir futuras enfermedades causadas por excesos de grasas o pérdida muscular, entre otras más.
“La edad metabólica la podemos revertir bajando de peso, alimentándonos adecuadamente, teniendo una rutina de ejercicio adecuada y buenos hábitos de descanso.
Además, cuando existe obesidad, la solución puede comenzar desde una cirugía bariátrica, hasta procedimientos nuevos con endoscopia, sin embargo, actualmente existen dietas especí- ficas basadas en el ADN del paciente “.