El Día de Muertos es una de las grandes tradiciones que México celebra en grande, desde la colocación de una ofrenda, hasta la decoración de las tumbas y el acompañamiento al camino de sus difuntos.
En buena parte del territorio nacional la tradición es tan grande que forma parte de los atractivos turísticos de lugares como Janitzio, en Michoacán, y Mixquic, en la Ciudad de México .
EL PANTEÓN DE MIXQUIC fue declarado monumento histórico por el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
JANITZIO La matriarca de la familia Justo, proveniente de Janitzio, ha sido testigo de la apertura de sus tradiciones al turismo, ella ha heredado la costumbre a sus hijos y nietos, sin embargo, la poca organización de las autoridades ha provocado dificultades para los lugareños al colocar sus ofrendas.
SANTA FE DE LA LAGUNA En ese poblado, gran parte de los pobladores aún utiliza su vestimenta típica denominada nahua o rollo. Eva, joven oriunda del poblado, ha colocado un altar a su padre, cuyo espíritu es recibido con un arco de cempasúchil.
SANTA FE DE LA LAGUNA En Santa Fe de la Laguna, la cruz repleta de pan de la región es llevada a la iglesia y posteriormente al panteón, de esto se encargan los padrinos o los hijos del difunto.
TZINTZUNZAN Tzintzunzan fue la capital del imperio purépecha, los lugareños pasan toda la noche del 1 al 2 de noviembre en el panteón, por la mañana reparten la comida y despiden a los difuntos con una misa.
QUIROGA Se denomina en lengua purépecha Animaecheri kéjtsïtakua (fiesta de las ánimas) la fecha de los muertos. El panteón, en San Jerónimo Purenchécuaro, en Quiroga, es visitado por pobladores quienes llevan música a los altares.
EL PANTEÓN DE SAN ANDRÉS MIXQUIC , ubicado en la alcaldía de Tláhuac, guarda vestigios del tzompantli, un altar para los muertos donde colocaban cráneos de las personas sacrificadas a los dioses. Con la conquista el tzompantli fue destruido y en su lugar se construyó un convento y el cementerio donde actualmente se realizan los festejos del Día de Muertos.
MIXQUIC El nombre “Mixquic” proviene de la voz náhuatl miquiztli: muerte, que a su vez que se descompone en miquiz: morir; y tli: lugar, por lo cual su significado sería “El lugar de la muerte”.
AL CENTRO DEL PANTEÓN se encuentra una cruz negra con calaveras labradas en piedra a los costados, es el Tzompantli, un altar prehispánico. Víctor Macedo enciende una veladora en el Tzompantli; es la primera vez que asiste a conocer las tradiciones del pueblo originario de San Andrés Mixquic.
EMILIANO, de 9 años, vela la tumba donde descansan su abuelo Agustín, su bisabuela Lupe y su tío Teodoro.
LOS HABITANTES DE MIXQUIC gastan entre 700 y mil 200 pesos para adornar las tumbas de sus seres queridos; también hay tumbas que son adornadas con lo elemental ante la falta de presupuesto