En la Plaza Elevada Este de la Acrópolis de Ek’ Balam, Yucatán, un antiguo depósito de agua fue transformado en una cámara funeraria, albergando los restos de dos individuos. El descubrimiento fue anunciado por el director del INAH, Diego Prieto Hernández, durante la conferencia de prensa matutina del presidente López Obrador.
El hallazgo proviene de los trabajos del proyecto arqueológico liderado por los arqueólogos Leticia Vargas de la Peña y Víctor R. Castillo Borges, centrados en la excavación y consolidación en la Plaza Elevada Este de la Acrópolis. Durante la investigación, vinculada al Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), se descubrieron nueve recintos habitacionales de élite con relieves estucados y vestigios de pintura mural.
Asociados a este conjunto de cuartos se hallaron dos depósitos artificiales para agua, uno en el extremo norte y otro en el sur; este último, denominado Chultún 2, fue convertido en un espacio ritual y depósito mortuorio, rellenado con una capa de tierra, escombro y piedras.
En el depósito reutilizado como cámara funeraria en Ek’ Balam, se encontró una piedra cilíndrica con fragmentos de una olla en la parte superior. Dos individuos fueron enterrados, con restos óseos mezclados con tierra. El primero, posiblemente masculino, con fémur y húmero. La segunda, femenina, depositada bocabajo, mostrando signos de edad avanzada. Se realizarán estudios detallados sobre ambos y la secuencia del depósito.