La mala salud cardiovascular no solamente está relacionada el riesgo de tener un infarto. Cuidar del corazón también es dejar de comer grasa, azúcar, cerveza y sentarse a ver series en Netflix por largas horas.
Sí, entre los factores de riesgo más importantes para el desarrollo de enfermedades cardiovasculares (ECV) están el sedentarismo, el tabaquismo y, claro, el consumo de alcohol.
Y es que, de acuerdo a la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF), las ECV ocupan el primer lugar de morbilidad y mortalidad en todo el mundo.
Para darse una idea, los fallecimientos por hipertensión se duplicaron en los últimos 10 años. Razón por la que la Organización Mundial de la Salud (OMS) –junto con la Federación Mundial del Corazón– busca reducir 25 por ciento la mortalidad prematura por ECV.
Y pretenden promover entornos favorables para la salud cardiaca, sobre todo porque gran parte de los factores de riesgo para desarrollar ECV son prevenibles.
Además, se debe tomar en cuenta que las cardiovasculopatías actualmente representan una importante carga para la economía mundial y un alto grado de pérdida de bienestar de la población a nivel global.
En México se estima que 128 mil 731 personas fallecieron por problemas del corazón en 2016, lo que equivale al 19 por ciento del total de muertes en el país.
De hecho, las ECV son la causa principal de muerte en las mujeres mexicanas, con 100 mil decesos al año.
La mujer es dos veces más propensa a padecer un accidente cardiovascular.
La mayoría de los factores de riesgo de las ECV son prevenibles
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“El corazón trabaja sin parar cada segundo de nuestras vidas por lo que debemos ser compasivos y cuidarlo. Adoptar ciertos hábitos saludables puede hacer una gran diferencia, sin significar demasiado esfuerzo. Las personas que logran seguir estas pautas no sólo viven más, sino que lo hacen en mejores condiciones (calidad de vida)”
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Las campañas de la Federación Mundial del Corazón:
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¿Cómo se manifiesta un ataque al corazón?
>> Presión, malestar o dolor en el pecho (dura minutos)
>> Sensación incómoda en brazos, cuello y hombros
>> Dificultad para respirar
>> Desmayos, mareos, sudor y náusea
Síntomas de un derrame
>> Adormecimiento o debilidad en el rostro, piernas, brazos (o en un lado del cuerpo).
>> Confusión y dificultad para comprender y hablar.
> Problemas para caminar, mareos y falta de equilibrio y coordinación.
(Malos) hábitos de todos
Entre los malos hábitos que tiene gran parte de la población mexicana y que aumenta el riesgo de padecer una ECV están:
>> Mala alimentación
>> Obesidad y sobrepeso
>>Hipertensión arterial
>>Falta de ejercicio y sedentarismo
>> Tabaquismo
>> Alto consumo de alcohol
>> Historial familiar
>> Colesterol elevado
> Diabetes
“No podemos subestimar la importancia global de la salud cardiovascular (...) El poder del cambio está en nuestras manos. Ciertos cambios en nuestro estilo de vida como comer más fruta y verdura, mantenerse activos o dejar de fumar podrían salvar millones de vidas”
Peligro de infarto
En México, cada dos minutos una persona sufre un infarto. De hecho, al año ocurren entre 250 mil y 280 mil infartos en el país.
Cada hora hay 32 mexicanos sufriendo este mal cardiaco, según la Asociación Nacional de Cardiólogos de México (ANCAM), organismo que dio a conocer que el 30 por ciento de las personas que padecen un infarto fallece antes de llegar a un centro de salud para recibir atención médica.
La mayoría de las muertes por infarto corresponde a adultos mayores, pero también es uno de las 10 causas principales por las que mueren jóvenes mexicanos de entre 15 y 29 años.
Al igual que la OMS y la Federación Mundial del Corazón, la Fundación Mexicana del Corazón busca disminuir el 25 por ciento de la mortalidad por males cardiacos para el año 2025.
De acuerdo a la OMS, alrededor de 17.5 millones de personas mueren anualmente por problemas cardiacos. Esto equivale a más del 30 por ciento de los fallecimientos totales en el mundo.
Y es que si se dejan los males cardiacos hereditarios o congénitos de lado, la salud del corazón depende de la responsabilidad y el cuidado que cada uno le da a su organismo.
Pero todo con medida, pues de acuerdo con la Cleveland Clinic, ejercitarse más allá del 85 por ciento del ritmo cardíaco máximo puede significar un peligro para la salud cardiovascular y ortopédica.
Ten cuidado con el corazón
Para prevenir el desarrollo y riesgo de ECV, se recomienda lo siguiente:
>> Alejarse del estrés y la ansiedad
>> Alimentarse sanamente
>> Hacer ejercicio moderado y diario
>> Informarse sobre el corazón y su salud
>> Dormir de manera adecuada
>> Mantener bajo el colesterol
>> No consumir grasas trans
>> Agregar fibra soluble a la dieta, así como frutos secos
>> Optar por pescados azules (salmón y atún)
>> No consumir sal
Sí a las grasas… buenas
El aceite de oliva –rico en omega 9– ayuda a que reduzca el colesterol malo en el cuerpo. La linaza y frutos secos tienen alto contenido de omega 3 de origen vegetal, que también ayuda a que eliminar el colesterol en la sangre.
La alta ingesta de frutas y verduras, así como un balance entre el consumo de carne blanca y roja, son la receta ideal para poder prevenir una muerte prematura, causada por un problema cardiovascular.
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