¿De qué murió Elvis Presley? Una historia de depresión, abusos y una influencia maligna

Bajo la gestión del Coronel Tom Parker, la carrera de Presley despegó, pero su salud comenzó a decaer con el paso de los años
Roberto Trejo Roberto Trejo Publicado el
Comparte esta nota

Han pasado casi 50 años desde que Elvis Presley, el Rey del Rock and Roll, dejó este mundo, pero aún persisten muchas incógnitas sobre su muerte a los 42 años.

Es bien sabido que la salud mental de Elvis Presley, nacido en Tupelo, Misisipi, se fue deteriorando a lo largo de su carrera, lo que se reflejó progresivamente en su salud física y en su peso, alcanzando hasta 130 kilos en la báscula.

En términos simples, un infarto al miocardio fue la causa de su muerte; sin embargo, detrás de este evento se oculta una historia de depresión, agotamiento laboral, abuso de medicamentos controlados y mala alimentación.

Durante los años 50 y 60, Presley era un símbolo de vitalidad y energía. Su figura atlética y enérgica encajaba perfectamente con su imagen de estrella del rock. Sin embargo, tras caer bajo la influencia del Coronel Tom Parker, su trayectoria despegó, pero su salud comenzó a decaer año tras año.

Elvis Presley - Unchained Melody

¿Qué le pasó a la salud de Elvis Presley?

Elvis no estaba satisfecho con la dirección que tomaba su carrera tras regresar de su estadía en Alemania con el ejército de Estados Unidos. Aunque deseaba participar en películas más ambiciosas, Parker solo le conseguía papeles en cintas románticas y musicales de poca relevancia. Además, cada vez interpretaba más canciones dirigidas a un público adulto y conservador, alejadas de la rebeldía de sus inicios.

El Rey del Rock quería renovar su carrera, salir de gira por todo el mundo y estar a la altura de los estándares del género en ese momento. Sin embargo, el Coronel Parker movió todos sus hilos para evitar que el cantante saliera del país, y en su lugar le consiguió una residencia de varios años en el Las Vegas Hotel & Casino, por una suma millonaria para la época.

A medida que avanzaba la década de 1970, Presley comenzó a ganar peso de manera alarmante. Este cambio fue gradual pero notable; su figura se transformaba ante los ojos del público y de quienes le rodeaban, mientras Parker seguía lucrando con su éxito y se negaba a salir del país.

Investigaciones indican que Parker se oponía a viajar al extranjero porque, en realidad, era Andreas Cornelis, un cirquero holandés que había emigrado ilegalmente a Estados Unidos para escapar de una investigación en la que se le acusaba de ser el presunto asesino de una mujer. Además, no estaba dispuesto a perder su mina de oro.

La triste etapa del Rey en Las Vegas

Durante sus conciertos en Las Vegas, se podía observar la faceta más triste del Rey, con dificultades para terminar los shows, sudando profusamente, balbuceando canciones y olvidando la letra. Todo esto ocurría mientras mantenía un ritmo frenético de trabajo, una mala alimentación y continuaba con el uso de medicamentos.

Este aumento de peso no fue solo el resultado de una dieta inadecuada o de hábitos sedentarios. Presley lidiaba con una serie de problemas de salud crónicos, como hipertensión y enfermedades cardíacas.

Estos problemas se agravaron con el consumo de medicamentos recetados, que se convirtieron en una parte central de su vida diaria. Entre estos fármacos estaban los sedantes, analgésicos y anfetaminas, prescritos para tratar desde el insomnio hasta el dolor físico y el estrés, pero que a menudo tenían efectos secundarios que contribuían a su creciente peso.

La Verdad No Contada Del Último Espectáculo De Elvis

Elvis y los medicamentos controlados

La relación de Presley con los medicamentos era compleja y peligrosa. Estos fármacos no solo ayudaban a manejar sus síntomas, sino que también fomentaban una dependencia que se convirtió en un círculo vicioso. Esta situación a menudo era pasada por alto por el Coronel Parker, quien priorizaba mantener en funcionamiento la máquina de dinero que era el Rey.

Los sedantes, por ejemplo, podían provocar retención de líquidos y aumento del apetito, mientras que las anfetaminas, aunque inicialmente se utilizaron para perder peso, acabaron teniendo efectos adversos sobre su salud general. Esto se combinó con una dieta rica en sándwiches fritos, malteadas, comida rápida y grandes cantidades de carne.

Para cuando llegó 1977, el estado físico de Presley reflejaba años de abuso de medicamentos y un deterioro de su salud. El 16 de agosto de ese año, Elvis Presley falleció en su mansión de Graceland a la edad de 42 años.

La causa oficial de su muerte fue un ataque al corazón, pero la autopsia reveló que el órgano vital estaba en una condición deteriorada, con signos de hipertensión y arteriosclerosis. Los informes médicos también destacaron la presencia de múltiples medicamentos en su sistema, un testimonio sombrío del impacto devastador que estas sustancias tuvieron en su cuerpo.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil