La menstruación es un proceso biológico natural para las mujeres y personas menstruantes pero no siempre se pone atención debido a los productos de higiene menstrual que se utilizan y se desconocen los materiales que están en contacto con su cuerpo.
Datos de la Primera Encuesta Nacional de Gestión Menstrual, llevada a cabo en 2022 por Essity, UNICEF y la organización Menstruación Digna México, muestra que más de 70% de los encuestados considera a la menstruación como un fenómeno natural que no debería ser estigmatizado.
Sin embargo, hablar sobre la menstruación y de los productos que se utilizan para su manejo sigue siendo un tema controversial lo que dificulta la socialización de datos útiles para la gestión menstrual. Por ejemplo, la encuesta, que incluyó a 3 mil participantes de entre 12 y 70 años, reveló que sólo 30% tiene un registro y comprensión sobre su ciclo menstrual.
Además, al menos 20% no dispone de condiciones básicas para un manejo menstrual digno, como acceso a agua potable, jabón, sanitarios adecuados, papel higiénico y privacidad.
No hay información sobre los productos de higiene para la menstruación
La encuesta también pone de relieve la falta de información sobre los productos menstruales comunes.
Estos productos, que incluyen tampones y compresas, están hechos de materiales como algodón, rayón, viscosa y poliéster.
Aunque estudios recientes alertaron sobre la posible presencia de sustancias químicas nocivas en estos artículos. Un estudio publicado en Current Environmental Health Report dejó ver que productos de gestión menstrual pueden contener compuestos como PFAS y ftalatos, que alteran el sistema endocrino.
Además, una investigación de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Berkeley encontró metales tóxicos como plomo y cadmio en tampones, aunque no se ha establecido con claridad su impacto en la salud.
Kathrin Schilling, profesora adjunta de ciencias de la salud ambiental en la Universidad de Columbia, precisó que la permeabilidad del tejido vaginal podría permitir la absorción de estos metales, aunque los efectos concretos aún no están claros.
Como alternativa, algunas empresas promueven productos más seguros como la copa menstrual, hecha de TPE (elastómero termoplástico).
Este dispositivo es 100% reciclable, libre de ingredientes animales, látex y PVC, y ofrece una opción más sostenible para quienes buscan una gestión menstrual consciente.
México debe comprometerse con el bienestar menstrual
El estudio también revela que es necesario mantener un compromiso con la mejora del bienestar menstrual a través de la educación y la eliminación de tabúes.
La alianza con Menstruación Digna México y UNICEF busca fomentar conversaciones abiertas sobre la menstruación y promover el acceso a productos y servicios adecuados.