¿De qué están hechos los cueritos de los chicharrones preparados? ¿Son de carne?

Los cueritos son una botana que no puede faltar en los chicharrones preparados. La crema, el aguacate, el jitomate en cubitos, la salsa picante, la col picada y la pizca de sal no sabrían igual sin ellos.

Algunas personas prefieren comerlos con un poco de salsa, limón y sal; otras más los acompañan de tostadas. Los cueritos, también se llevan el protagonismo cuando hablamos de los famosos dorilocos, donde su sabor ácido y salado se ha llevado el amor de muchos, pero, te has preguntado, ¿cómo están compuestos?

Cueritos: ¿de qué están hechos?

Los cueritos no sólo son una botana típica de México, también lo son en España, de acuerdo con Larousse Cocina, sitio que además señala que este delicioso producto está compuesto principalmente por la piel del cerdo.

Además de ésta, los cueritos están marinados en vinagre y se venden en muchas partes del país; no obstante, hay personas que los preparan de forma casera, en donde agregan sal, hierbas de olor, cebolla, ajos, chile de árbol, chiles en vinagre e incluso piña.

Todo lo anterior dependerá de la región en donde se preparen, ya que incluso cómo son comidos y llamados cambia en las diferentes entidades del país. En Jalisco, por ejemplo, hacen tostadas de cueritos, las cuales son acompañadas con lechuga y se bañan con salsa dulce, de acuerdo con el Diccionario Enciclopédico de la Gastronomía Mexicana.

¿Cómo se hacen los cueritos?

Hay diferentes formas de realizar estas botanas, una manera muy sencilla de hacerlo es consiguiendo los cueritos de cerdo limpios y cortados a tu gusto, si quieres hacer unos chicharrones preparados tradicionales, puedes pedirlos cortados en bastones o tiras.

Una vez listos, se debe poner agua a calentar con un poco de sal, luego se añadirán los cueritos y se dejarán hervir con el agua, es importante moverlos constantemente para que se logre una buena cocción.

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Posteriormente se mojan en agua fría y se cuelan, para luego colocarlos en un recipiente de vidrio y añadirles una cebolla, ajos, hierbas de olor, agua, vinagre y sal al gusto. Esta mezcla se debe dejar reposar todo un día en un lugar fresco, una vez transcurrido el tiempo, los cueritos están listos para comer.