La aprobación de Mario Vargas Llosa para ser parte de los “inmortales”, como se le conoce a los integrantes de la Academia Francesa, ha sido criticada por académicos. Esto pues, denuncian, en los últimos años se ha posicionado políticamente en favor de candidatos de extrema derecha en América Latina.
Luego de que se aprobó la entrada de Vargas Llosa a la institución encargada de la preservación de la lengua francesa, a finales de noviembre pasado, cinco de sus integrantes se manifestaron al considerar que “esta decisión presenta graves problemas éticos”. Según publicaron en un desplegado en el diario Libération el pasado 9 de diciembre.
Entre los argumentos contra la “inmortalidad” de Vargas Llosa, los académicos mencionan su reciente apoyo a José Antonio Kast, quien perdió la elección presidencial de Chile ante Gabriel Boric el domingo 19 y a quien definen como un “nostálgico de la dictadura militar de Pinochet”, en la que su hermano, Miguel Kast, fue un alto funcionario.
También recuerdan su campaña a favor de Keiko Fujimori, “a la que presenta como último obstáculo contra el comunismo”. Esto pese a que, tras perder la elección contra Pedro Castillo, la hija de Alberto Fujimori ha buscado la destitución del maestro rural, y miembros de su grupo, incluso, promueven un golpe de Estado, lo que ha crispado el ambiente político en Perú.
Asimismo, hacen referencia a su respaldo por el presidente colombiano Iván Duque, cuya administración se opone a los acuerdos de paz firmados con las FARC y que disuelve protestas “a disparo limpio”. Así como que, en 1995, pidió a los argentinos “enterrar el pasado” al referirse a los crímenes cometidos por las dictaduras del siglo anterior.
Incluir al Premio Nobel de Literatura 2010 entre los “inmortales” de la lengua francesa “mancilla la imagen de Francia en América Latina, donde sus posturas extremistas son bien conocidas y generan un fuerte rechazo”, advierte el documento.
Los cinco firmantes son Évelyn Mesclier, directora de investigación del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo; la filósofa Sylvie Taussig, investigadora del Centro Nacional de Investigaciones Científicas; el lingüista César Itier; y los antropólogos Pablo del Valle y Valérie Robin Azevedo, académica de la Universidad de París.
En defensa de Vargas Llosa salió Manuel Valls, exprimer ministro francés cercano al partido español Ciudadanos, al que el escritor apoyaba hasta que el exfuncionario declaró su simpatía por el Partido Popular en 2019, quien ironizó en Twitter que “para ser académico hay que haber sido simpatizante de (Fidel) Castro, (Hugo) Chávez o los herederos de Sendero Luminoso”.
