Luego de una larga gira, Alejandro Fernández festejó haber llegado a su hogar, en donde fue recibido por su mascota, un perro de raza Komondor llamado Kush, quien inmediatamente saltó hacia el cantante feliz de verlo una vez más.
El momento fue compartido por “el potrillo” en su cuenta de Instagram, en la cual publicó una serie de fotografías que muestran el encuentro con el can. A estas agregó la leyenda: “Qué rico llegar a casa después de una gira increíble”.
A pesar de que en las imágenes se puede ver a la mascota feliz, las postales causaron una gran polémica entre los comentarios de los usuarios de redes sociales, pues aseguraron que Kush está descuidado.
Esto, debido a que el perro parece tener rastas por todo su pelo, las cuales incluso llegan a cubrir parte de su cara y hocico, lo cual generó una serie de críticas e indicaron que era necesario cuidar mucho mejor de su pelaje.
De esta forma, algunos de los comentarios son: “Hay que peinarlo y es blanco y no parece así se ve que está descuidado pobre perrito”, “Regañe a su gente que no le cuidaron al perrito”, “Qué decepción ver como tienes tan descuidado a tu perro” y “Tanto dinero y no lo pueden bañar”.
No obstante, algunas personas defendieron Alejandro Fernández de las críticas, ya que explicaron que la raza del perro es Komondor, mascotas que son conocidas por su particular pelaje, pues éste parece estar compuesto por rastas.
Estos animales son originarios de Hungría, su pelaje suele tocar el suelo y se enrolla dando apariencia de un dreadlock. De acuerdo con el sitio de Purina su “pelaje con rastas tan característico le ofrecía protección de la dureza del clima y depredadores”.
De esta manera, la apariencia de Kush es completamente normal. Por lo cual, sus fans indicaron: “Así es la raza del perro”, “Así es, ese es su pelo natural”, “Antes de criticar busquen la raza de perros Komondor” y “No es descuido, esa es su apariencia”.
Esta no es la primera ocasión en la que Alejandro Fernández es criticado por la apariencia de Kush, ya en 2017 también desató toda una serie de críticas al compartir una fotografía de su mascota, quien en ese momento ya tenía rastas.
