Tras cerrar sus puertas más de un año debido a la pandemia de COVID-19, los recintos museísticos, ahora, además de ser espacios para el aprendizaje y la recreación, se han adaptado; tras su reapertura también se suman como lugares que permiten vislumbrar programas de acompañamiento y reactivación emocional para su público. Es el caso del Museo Interactivo de Economía (MIDE), por lo que su directora Silvia Singer relata a Reporte Índigo que el cierre obligado durante gran parte de 2020 sí modificó su plan de acción.
“Han sido, sin duda, años muy difíciles, el encierro nos ha obligado a cerrar por mucho tiempo. Los museos que damos servicio a las escuelas tenemos una situación muy complicada de dependencia, entonces si las escuelas no están trabajando, pues los estudiantes no están viniendo”, relata.
Sin embargo, comparte, a cada reto le corresponde una oportunidad. Durante estos meses, en lo que concierne a sus objetivos y metas como un museo interactivo, han tenido que mirar hacia lugares nunca explorados.
Además de campañas para propiciar en los visitantes confianza y seguridad durante las visitas al museo, la directora adelantó que, parte de su plan para 2022 y 2023, es crear exposiciones que detonen discusiones sobre los efectos del fenómeno sanitario, así como ser un apoyo y brindar educación financiera.
“El regreso ha sido lento; sin embargo, pudimos armar una exposición temporal que va a estar los primeros meses de 2022: Crónica de una pandemia, del fotógrafo Santiago Arau, muestra cómo vivimos los mexicanos el ‘quédate en casa’, cómo nos ha afectado y cómo lo vivimos diferente dependiendo de dónde estamos y qué hacemos”, explica.
“Yo me siento muy orgullosa de estar en la cabeza de un equipo como este, que está comprometido con los que nos visitan”
Nuevos horizontes en el MIDE
Con esta exhibición, el MIDE comenzará su renovación para generar una nueva oferta para sus visitantes, esta entrará en marcha el próximo año. Para ello, Silvia comenta que se ha hecho un estudio sobre su público y saber cuáles son sus reacciones de expectativas hacia el museo.
“Una de las cosas, que claramente lo demostramos de manera fehaciente, es que necesitamos nuevos públicos, tenemos que buscarlos en otros lados y para eso hay que crear otro tipo de oferta”, indica.
Con este plan de acción, impera, no desean hacer a un lado su vocación, al contrario, buscan fomentar y agregar más valores dentro de sus propuestas.
“El aspecto importante del museo es que habla de economía y de la vida cotidiana, pero hay muchas maneras de hablar de esto y no siempre tiene que ver la expresión como la visualizamos necesariamente en juego e interactividad, queremos experimentar con arte, que nos permita reflexionar sobre las condiciones económicas, cómo vivimos la toma de decisiones, queremos hablar sobre estos aspectos desde la creatividad”, explica.
El objetivo es hacer exposiciones colaborativas que le hablen a otro tipo de público. Como parte de sus investigaciones, también visibilizaron otro campo de trabajo, pues descubrieron que muchos de sus visitantes tienen un especial interés en muestras sobre la vida del emprendedor.
“¿Qué pasa con el emprendedor?, ¿qué tan factibles son estas historias ‘milagro’ de los que se vuelven millonarios?, pero cuáles de esas historias nos pueden enseñar oportunidades que sí podemos desarrollar todos nosotros: emprendedurismo, bienestar, de cómo podemos vivir en sociedad de una manera un poco más armónica y con menos diferencia”, abunda.
Todo esto incorporando aspectos estéticos, algo que, indica, sumará a la oferta que están interesados en experimentar para su nueva etapa, pues la directora asegura que con las directrices que han investigado podrían generar un mayor impacto en sus visitantes.
“Queremos explorar la parte de los valores estéticos, nuestro carácter de ser innovadores, organizarnos, cosas que puedan ser del interés de públicos más amplios, sin abandonar esa parte del museo que apoya a la escuela y educación”.
“La verdad es que el MIDE ha tenido una participación activa e importante en la promoción financiera a nivel escolar. No queremos y no descuidamos esto, sólo ampliar nuestras miradas, en donde aprendamos a salir adelante ante las dificultades financieras; es lo que vamos a tratar de reforzar de manera muy seria”, comparte.
Un camino hacia la virtualidad
Otro de los aspectos cruciales para adaptarse a esta nueva etapa tiene que ver con la explotación en la digitalidad. De acuerdo con Silvia, su oferta no sólo debe ser una visita virtual a sus instalaciones, sino llevar más allá el plan de acción.
“Con los museos de arte podría tener mucho sentido, en los interactivos es un poco complicado, ¿qué vas a visitar, vas a enseñarles a apretar cosas? Pues no, la exploración de la digitalidad del museo es algo muy rico e importante en el museo, queremos estar a la vanguardia”, informa.
Actualmente están investigando y haciendo prototipos en tres sentidos: mejorando las opciones digitales dentro del museo; buscando qué otras opciones en la plataforma digital pueden ser más atractivas y enganchen al visitante, y fomentar un ecosistema híbrido donde la digitalidad del museo se conecte con la remota.
De esta forma buscan que, para enero o febrero de 2022, los usuarios accedan desde cualquier parte y, así, crear un puente entre ambas plataformas para generar un diálogo.
“En mi opinión, es que la pandemia nos hizo ponernos de frente con cosas que ya estaban ahí, pero que no habíamos querido ver”, agrega.
La baja en las taquillas ha sido otra de las aristas a enfrentar debido al cierre. A pesar de que el MIDE contaba con asesorías económicas para sus visitantes, al ser un recinto independiente no contó con apoyo por parte de las autoridades federales o locales, lo que podría definir gran parte de su futuro.
“Hemos tenido pérdidas brutales, una baja de más del 10 por ciento de nuestros visitantes usuales, pero ha sido gracias a nuestra administración que pudimos sobrevivir con prácticamente el mismo número de colaboradores en estos dos años; sin embargo, la manera de operar está en riesgo porque no tenemos apoyo del exterior, se están recuperando las rentas del espacio y esperamos para el 2023 ya podamos recuperar la taquilla”, concluye.
Un gran logro en 2021
El éxito más importante de la transición de 2021 a 2022 es que el MIDE estuvo a cargo de diseñar y poner en marcha el nuevo Museo del Banco de México.
“Es un ejemplo museístico de primer nivel en el que usamos todo nuestro conocimiento y experiencia, le hemos dado a México un nuevo espacio patrimonial”, plática Silvia.
