Si algo caracteriza a la recta final del año (e incluso el inicio del siguiente) son las bajas temperaturas que se presentan en esta temporada; y si tu casa “parece un congelador”, tenemos consejos que pueden ayudarte a mantenerla cálida.
¡Ojo! No es necesario tener un servicio de calefacción en tu hogar o comprar grandes aparatos que incrementen el gasto de energía, ya que puedes lograrlo cambiando algunas rutinas y la decoración de tu hogar.
¿Por qué baja la temperatura a finales de año?
Antes de comenzar, es importante que tengas en cuenta que, aunque durante diciembre y enero las bajas temperaturas son más perceptibles, en México la temporada de frentes fríos comienza desde septiembre.
Este fenómeno meteorológico continúa hasta mayo del año siguiente, debido a que a lo largo de estos meses diferentes masas de aire frío chocan con las de aire caliente que es más denso.
Lo anterior, provoca que el aire frío se meta como una cuña debajo del aire caliente, lo que genera movimiento e inestabilidad que se traducen en descensos de temperatura, heladas, vientos intensos, fuerte oleaje, abundante nubosidad y lloviznas.
A pesar de que es de septiembre a mayo cuando hay mayor presencia de ellos, la Comisión Nacional del Agua indica que en México es muy variable, por lo cual podrás usar las recomendaciones a lo largo del año.
Utiliza cortinas gruesas o térmicas
Si quieres evitar que las habitaciones de tu casa estén frías, es importante que mantengas las ventanas cubiertas con cortinas gruesas y, en caso de que esté dentro de tus posibilidades, que sean hechas de tela térmica.
Estas cortinas tienen un punto a su favor, ya que además de funcionar para conservar la temperatura cálida durante el invierno, también mantienen el clima fresco cuando es verano, ya que son aislantes.
De esta manera la temperatura del hogar no presenta variaciones, a pesar de que la del exterior sí, por la forma en la que están hechas, debido a que suelen tener tres capas. De acuerdo con Vía Célere éstas son:
- Primera capa: ornamental, suele estar hecha con algodón, lana o seda.
- Segunda capa: para ésta se usa algún material resistente a la temperatura, como el fieltro o el algodón grueso.
- Tercera capa: su función es ayudar a proteger la capa interior de la luz solar. Además, esta última capa también actúa como barrera de vapor, evitando la condensación en la zona de las ventanas.
Cubre los pisos de tu hogar con alfombras
Aunque suene extraño, el piso puede generar que la temperatura de la casa disminuya. Según la Fundación Nacional de la Energía de Reino Unido (NEF), el piso representa un 10 por ciento de la pérdida de calor si no está aislado.
Para combatirlo, puedes hacer uso de alfombras gruesas que te ayuden a tapar el suelo. Este paso tiene una doble función que sin duda disfrutarás, ya que no volverás a pisar el suelo frío. ¡Qué bendición!
Aprovecha las horas de Sol para ventilar
Es importante tener en cuenta que para mantener caliente tu casa, las ventanas deben permanecer cerradas durante la noche, ya que es cuando la temperatura baja aún más, pero eso no quiere decir que no las abrirás jamás.
El momento ideal para hacerlo es cerca del mediodía o cuando notes que el Sol da directamente a tu casa, ya que así aprovecharás la luz solar, tu hogar se ventilará y la temperatura no se verá afectada.
Una vez que el Sol comience a ocultarse, vuelve a cerrarlas y cubrirlas. Como un consejo extra, aprovecha el calor cuando cocines y no abras las ventanas, a menos de que sea necesario ventilar por los aromas.
Cubre rendijas de ventanas y puertas
Las puertas suelen tener un espacio vacío entre el suelo y su comienzo, desde el cual se pueden llegar a filtrar corrientes de aire frío que disminuirán considerablemente la temperatura de tu casa.
En el caso de las ventanas puede ocurrir algo similar, debido a que algunas de ellas tienen pequeñas rendijas desde las cuales ingresa el viento. Para combatir ambos casos te sugerimos utilizar “burletes”.
Estas son bandas acolchadas, de silicona, que se colocan en los bordes de las ventanas, en los carriles, en los laterales y debajo de las puertas. Al ser de este material no afectan en el funcionamiento y mantiene aislada la casa.
Además son muy sencillas de colocar y se pueden retirar en cualquier momento. En caso de que no quieras colocar un burlete en las ventanas, puedes hacer uso de cinta aislante para sellar las posibles rendijas.
Mantén las puertas de los cuartos cerradas
Un consejo para mantener el calor dentro de las habitaciones es tener las puertas de los cuartos cerradas la mayor parte del tiempo, ya que de esta manera evitarás la entrada de corrientes de aire frío.
Un plus: puedes usar velas ocasionalmente
En espacios pequeños, como las habitaciones, puedes utilizar velas ya que estas te ayudarán a que el cuarto se caliente, aunque no es recomendable prenderlas constantemente, únicamente en ocasiones especiales.
Pues además de incrementar el riesgo de un incendio, el uso diario de velas de parafina en espacios que no son ventilados, pueden provocar que el aire se contamine. Pero, de vez en cuando, usar una vela no es malo y te mantendrá calientito.
Además de estos consejos, es importante que tú estés protegido ante el frío, para ello la Conagua recomienda vestir con ropa gruesa y calzado cerrado, cubrir el cuerpo con chamarras, abrigos, bufandas y guantes, así como consumir frutas y vitaminas A y C.
