Tal vez ya sean menos las veces que vas al cine a ver una película, acompañado de palomitas, pasas con chocolate y un refresco tamaño jumbo. Y es muy probable que la razón de esto sea que te esperas a que esas cintas lleguen a Netflix o, en el peor de los casos, porque prefieres bajarlas de un servicio o plataforma en línea de manera ilegal.
Sin embargo, sea cual sea la forma en la que disfrutas lo mejor del cine, ahora podría ser posible que no tengas que comprar un boleto y podrás ver la película más esperada desde la comodidad de tu hogar, inclusive el mismo día en que será lanzada a la cartelera.
Esto gracias a que Sean Parker, creador de Napster, propuso que se creara Screening Room, una plataforma que le daría un duro golpe a la industria del cine y revolucionaría la distribución de filmes.
Screening Room estaría basada en un sistema con el que los usuarios pagarían por ver los estrenos de la cartelera y cobraría un monto de 50 dólares, de los cuales 20 serían destinados para las productoras y distribuidoras por las pérdidas que se regularmente se generarían en taquilla.
Si bien Napster revolucionó el mundo de la distribución de música y el streaming en línea, podría replicar este éxito en la industria cinematográfica, por lo que gigantes como Sony, Universal y Fox ya se han pronunciado muy preocupados ante la propuesta de Parker.
No solo eso, también las cadenas AMC (las salas de cine en Estados Unidos) expresaron su descontento si Screening Room llegara a ser una realidad.
De hecho un directivo de una distribuidora –que prefirió el anonimato– dijo a The Guardian que “esta es una noticia muy peligrosa. No sabes lo molesto que estoy en este momento (…) Podría ser el comienzo del fin, y la mitad de las salas de cine en este país podrían cerrar sus puertas”.