“No te casarás con el príncipe... te casarás con el rey. Reina serás... hasta que llegue otra más joven y más bella para derribarte y apoderarse de todo lo que te es querido. Dieciséis para él, tres para ti. De oro serán sus coronas y de oro sus mortajas. Y cuando las lágrimas te ahoguen, el valonqar te rodeará el cuello blanco con las manos y te arrebatará la vida”
Cersei Lannister vive con la terrible certeza que verá morir a cada uno de sus tres hijos, una ominosa profecía le recuerda a cada instante que partirá de este mundo como una madre en desgracia, alejada por completo del amor de su familia y del poder de Poniente.
Así como en la historia antigua de Edipo, Cersei hace que la profecía se cumpla con cada uno de sus intentos por evitarla. Al apartar a las personas que podrían hacer daño a sus hijos, la reina de poniente ignora que de manera indirecta a puesto la soga en el cuello de sus descendientes.
Cuando era aún una niña, Cersei visitó en los bosques de Lannisport a la bruja conocida como Maggy ‘La Rana’, a quien amenazó para que le dijera con quien se casaría y cuántos hijos tendría en el futuro; la hechicera aceptó y su profecía fue:
“No te casarás con el príncipe… te casarás con el rey. Reina serás… hasta que llegue otra más joven y más bella para derribarte y apoderarse de todo lo que te es querido. Dieciséis para él, tres para ti. De oro serán sus coronas y de oro sus mortajas. Y cuando las lágrimas te ahoguen, el valonqar te rodeará el cuello blanco con las manos y te arrebatará la vida”.
Uno a uno se han ido cumpliendo los vaticinios de ‘La Rana’, Cersei no se casó con el príncipe Rhaegar Targaryen, sino con el rey Robert Baratheon, quien tuvo 16 hijos fuera del matrimonio, y ella tres, cuyo padre no era el rey, sino su hermano gemelo Jaimie Lannister.
Lo que al inicio Cersei tomó como las palabras de una charlatana, poco a poco se fue materializando en la realidad, ahora la reina de poniente debía proteger a toda costa su poder y a sus tres hijos nacidos de una relación incestuosa; Joffrey, Myrcella y Tommen.
La hija de Tywin Lannister, descrita como una mujer hermosa de cabellos dorados y esbelta figura, al inicio odiaba su feminidad por impedirle sobresalir en una sociedad patriarcal como la de Poniente, pero con el tiempo aprendió a usarla para obtener todo lo que deseaba.
Aunque Cersei es una mujer fuerte y una de las jugadoras más sobresalientes del juego de tronos, ella mira con despreció a las demás féminas de los siete reinos, a quienes considera como seres débiles y despreciables, es decir, reproduce los valores machistas que le han inculcado.
La reina de poniente es una mujer narcisista y ambiciosa, que no se detendrá ante nada para alcanzar el poder y el prestigio para sus tres hijos, aunque esa misma egolatría sea la que la lleve a su fatídico destino.
Cersei se vuelve una mujer llena de odio y de rencor, pues no entiende porque su hermano que nació minutos después de ella tiene mayores atenciones y es entrenado para gobernar, mientras que a ella la crían para ser una perfecta dama de la corte.
La mujer guarda un profundo respeto por su padre, sin embargo, no le perdona que la haya casado con el rey Robert, un hombre alcohólico y misógino al que desprecia y al que nunca llegó realmente a amar.
Cersei ve morir envenenado en el banquete de bodas a su hijo Joffrey, quien recien se había casado con Margeary Tyrell, y el cual llegó al Trono de Hierro luego que su madre planeo la muerte del rey Robert y el encarcelamiento y ejecución de la mano del rey, Eddar Stark.
La Segunda en morir es Myrcella, quien es envenenada en el reino de Dorne por Ellaria Martell, quien vio como ‘La Montaña’, fiel verdugo de Cersei Lannister, asesinó a su amante, el príncipe Oberyn Martell.
Cuando Joffrey muere, Tommen sube al trono de hierro y se casa con Margeary, pero Cersei veo en ella a la reina que la profecía señala que la destronará, por lo que el día de una ceremonia resguarda a su hijo y hace volar con fuego valiryo la iglesia en donde se llevaría la misa.
Tommen, al darse cuenta de las acciones de su madre y ante la muerte de cientos de personas, decide lanzarse por la ventana de su habitación y terminar así con su vida, con lo cual la segunda parte de la profecía también quedó cumplida.
La última parte del vaticinio señala que Cersei será asesina por el valonqar (hermano pequeño), por lo cual infiere que se trata de su hermano menor Tyrion Lannister, a quien desprecia profundamente por haber provocado la muerte de su madre durante el parto.
Sin embargo, el hermano pequeño podría no se Tyrion, sino su eterno amante y el amor de su vida, Jaimie Lannister, quien cada vez ve con mayor preocupación la transformación de su hermana melliza, por lo que podría ser él quien terminará con su vida.
Respecto a la mujer joven y bella que le quitaría el reinado a Cersei. Margeary Tyrell murió durante la explosión, pero la reina de Poniente ignora que del otro lado del océano se acerca la joven Daenerys Targaryen para reclamar el trono, con lo cual la profecía quedará completada.
