La Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) fue elegida por la ONU y la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) para liderar la misión Gxiba-1, cuyo objetivo será la observación de los volcanes activos del país.
La universidad mexicana superó con éxito las seis rondas del concurso KiboCUBE, programa lanzado en 2015 que beneficia a los estados miembros de la ONU.
“Trabajar juntos para promover la inclusión y la diversidad en las actividades espaciales es fundamental para no dejar a nadie atrás. El programa KiboCUBE, bajo la iniciativa Acceso al espacio para todos, simboliza la misión común de UNOOSA y JAXA para expandir la comunidad espacial de manera sostenible”, expresó la directora de UNOOSA, Simonetta Di Pippo.
KiboCUBE ha logrado que países como Kenia, Guatemala y Mauricio lanzaran sus primeros satélites.
Inicia la aventura de Gxiba
Cuando la UPAEP creó la carrera de Ingeniería Aeroespacial, uno de sus objetivos era estudiar los volcanes desde el espacio, sobre todo el Popocatépetl; sin embargo, en el camino, afortunadamente, la NASA los escogió para hacer el satélite AztechSat-1, que tenía que ver con telecomunicaciones.
AztechSat-1 fue el primer nanosatélite mexicano 100 por ciento diseñado y construido por un grupo de estudiantes y profesores del país.
“Después de eso nos preguntamos ¿qué vamos a hacer? y retomamos el proyecto de los volcanes que ya se venía trabajando, pero que habíamos puesto en pausa. Por iniciativa de los profesores vieron la convocatoria y decidimos aplicar”, cuenta el maestro Eugenio Urrutia, vicerrector de Investigación de la UPAEP, en entrevista con Reporte Índigo.
Si bien confiesa que aplicaron con mucho entusiasmo y ganas, vivían en incertidumbre, porque al ser un concurso de índole mundial, sabían que no sería fácil ganarlo.
La experiencia previa con AztechSat-1, donde demostraron las capacidades de sus profesores y estudiantes, y que los objetivos de la misión Gxiba-1 tienen que ver con la protección de la gente que vive alrededor de los volcanes, considera Urrutia, fueron claves para obtener el triunfo.
Por el momento, la UPAEP sólo ha conformado el equipo que trabajará en la misión, el cual está formado por más de 40 personas, entre estudiantes y profesores, la mayoría, dice el vicerrector, son estudiantes.
Para la elaboración de Gxiba-1 será necesario atender 11 sistemas que son, por ejemplo, la administración del proyecto, la ingeniería de sistemas, todo lo que tiene que ver con la estructura que va a volar, la electrónica, el software y el aspecto térmico, por mencionar algunos.
“En cada uno de estos sistemas tenemos un profesor líder y un grupo de estudiantes y lo que hemos hecho hasta el momento es conformar el equipo. Empezamos haciendo el listado de requerimientos que necesita el proyecto cumplir para ser exitoso”, dice el maestro Eugenio.
Después de la fase de requerimientos, llegará la de diseño preliminar y la de diseño crítico, para de ahí pasar a la fase de construcción, integración, probarlo en Puebla y luego llevarlo a Japón a que le realicen las pruebas finales. Una vez que se hagan, será entregado para que sea lanzado desde Japón.
Urrutia calcula que se tardarán dos años en el desarrollo del proyecto, que tendrá, aproximadamente, un costo de 400 mil dólares.
Un referente
La UPAEP se encuentra feliz, porque se convertirá en la primera institución mexicana en poner el segundo satélite mexicano en la Estación Espacial Internacional.
“Eso nos reta a seguir buscando no sólo este tipo de proyectos, sino eventualmente otros más grandes y complejos para que nuestros estudiantes y la sociedad se vean beneficiados, porque al final es una oportunidad muy importante para México”, considera Eugenio Urrutia.
Para él, en México la industria aeroespacial ha estado creciendo mucho en los últimos años y con este tipo de acciones, supone, lo hará más, porque se generarán empleos y una importante derrama económica.
Además, proyectos como Gxiba-1 y AztechSat-1 han convertido a esta institución privada en un referente dentro del estudio y la investigación de la ingeniería aeroespacial.
“La carrera de Ingeniería Aeroespacial tiene una gran demanda y algunas otras carreras relacionadas, como Ingeniería Electrónica, Mecatrónica, Biónica, Computación, incluso, Ingeniería Industrial, de alguna forma, han sido un foco de atención para que los estudiantes se fijen en la UPAEP para realizar sus estudios”, enfatiza el vicerrector.
Tomando como ejemplo el desarrollo de este CubeSat 1U para observar los volcanes activos de México y analizar la dispersión de cenizas, Eugenio Urrutia considera que muchas universidades particulares de México están tratando de brindar su granito de arena para que México mejore en todos los sentidos.
“La UPAEP es una institución particular, pero cuyo objeto es público, es decir, el trabajo por la sociedad simplemente se administra de forma privada, pero su misión es pública, en el sentido de que busca el bien común”, refiere.