Desde hace dos meses, las redes sociales comenzaron a inundarse de videos que muestran a personas que se echan una cubeta de agua fría sobre la cabeza.
El acto corresponde al famoso “Ice Bucket Challenge” (o “Reto del Balde de Hielo”), que busca crear conciencia sobre la llamada esclerosis lateral amiotrófica (ALS, en inglés), comúnmente conocida como la enfermedad de Lou Gehrig, que se caracteriza por la muerte de las células nerviosas del cerebro y la médula espinal.
El desafío, en el que han participado figuras públicas que van desde Mark Zuckerberg y Tim Cook hasta Justin Timberlake, Lady Gaga y Bill Gates, no solo ha creado conciencia sobre este padecimiento que afecta progresivamente el movimiento voluntario de los músculos, sino que también ha contribuido a recaudar fondos de millones de dólares para la ALS Association.
Desde el pasado 29 de julio hasta el día de ayer, la ALS Association ha recaudado 15.6 millones en donaciones, en comparación con 1.8 millones recibidos durante el mismo periodo del año pasado, reportó la fundación.
A la fecha, se han sumado 307 mil 598 nuevos donadores.
Y todo gracias a la viralización del desafío en redes sociales. Desde el 29 de julio, el fenómeno del Ice Bucket Challenge ha sido mencionado más de 2.2 millones de veces en Twitter, según The New York Times.
Y más de 1.2 millones de videos del popular reto han sido compartidos en Facebook entre el primero de junio y el 13 de agosto.
De hecho, el ritmo con el que se han recaudado los fondos ha causado gran sorpresa entre las organizaciones de ALS.
“Nunca habíamos visto nada como esto en la historia de la enfermedad”, dijo en un comunicado Barbara Newhouse, Presidente y CEO de la de la ALS Association. “No podríamos estar más emocionados con el nivel de compasión, generosidad y sentido del humor que las personas están mostrando a medida que forman parte de esta impactante iniciativa viral”.
Agregó que si bien las donaciones monetarias son absolutamente increíbles, “la visibilidad que esta enfermedad está obteniendo como resultado del desafío es verdaderamente invaluable. Personas que nunca han escuchado del ALS ahora están involucradas en la lucha contra la enfermedad”.