“Cuando comenzamos a hacer el programa por primera vez, tuvimos esta idea extraña e ingenua de que duraría mucho tiempo. Era nuestro primer programa y realmente no sabíamos mucho sobre cuán a menudo cancelaban los programas, pero siempre había esta sensación especial sobre el programa, que duraría un rato”, dijo a CNN Carter Bays, uno de los creadores del sitcom “How I met your mother”.
Nueve temporadas y 208 episodios después, la historia de amor de Ted Mosby (Josh Radnor), llegó a su fin el lunes pasado.
De las múltiples teorías acerca del final que circulaban por la Red, la principal apuntaba a que la Madre estaría muerta. La realidad fue que finalmente Ted conoció a la madre de sus dos hijos, Tracy McConnell (Cristin Milioti), aquella mujer que tocó en la banda durante la boda de Robin (Cobie Smulders) y Barney (Neil Patrick Harris).
Fue amor a primera vista. “¿Te casarías conmigo el jueves?”, le preguntó Ted a Tracy en su departamento. Llegado el día de su boda, Lily (Alyson Hannigan) da un resumen de lo que seguramente todos concluyeron: “brindemos por Ted Mosby. El hombre que tiene la mayor resistencia emocional que cualquier otra persona que conozco. Fue un camino largo y difícil. Gracias a Dios que llegamos”.
El último episodio de la serie se desenvolvió con la misma narrativa que la caracterizó a lo largo de casi una década de emisión: una mezcla de saltos rápidos de tiempo y flashbacks, carente de orden cronológico.
Una fórmula que revolucionó la manera en la que se realizaban las sitcoms, tales como la popular serie “friends”.
En un momento transcurre la boda de Robin y Barney, para de pronto escuchar, años más tarde, que Barney le dice a su grupo de amigos: “esto no es un matrimonio fracasado, es un matrimonio muy exitoso que solo duró tres años”.
Mientras que en 2020, Barney tiene una bebé, fruto de una noche de sexo con una de las 31 mujeres con las que compartió cama durante 31 días.
“Eres el amor de mi vida”, Barney le dice a su hija. “Todo lo que tengo y todo lo que soy es tuyo. Siempre”.
