Arte urbano cambia rostro de Central de Abasto
Central de Muros podría convertirse en la galería al aire libre más grande del mundo, ya que la extensión total de toda la CEDA es de 327 hectáreas
Hidalgo Neira[kaltura-widget uiconfid=”38045831″ entryid=”0_43w987na” responsive=”true” hoveringControls=”true” width=”100%” height=”75%” /]
Adentro, el barullo generado por los diableros que transportan mercancías sin detenerse. Hierberos, fruteros y demás comerciantes que madrugan para ofrecer sus productos no descansan en sus transacciones, mientras afuera de las naves industriales de la Central de Abastos de la Ciudad de México (CEDA) las paredes blancas yacen vírgenes, desnudas y descuidadas por el paso del tiempo.
Al menos eso era lo que ocurría hasta hace unos meses, antes de que llegaran los pinceles, las brochas, los aerosoles, latas de pintura y el talento de decenas de artistas gráficos que hicieron de estos muros, sus lienzos libres para plasmar sus ideas en arte.
Con la iniciativa de la agencia We Do Things se creó el proyecto Central de Muros, el que tras un año de planeación en conjunto con la CEDA se logró poner en marcha que más de 20 mil metros cuadrados se dispusieron para el arte urbano y generan una conciencia social entre quienes laboran en esta ciudad laberíntica de comestibles y las más de 500 mil personas que la recorren diariamente.
“Para nosotros era importante encontrar un espacio donde se juntara todo, que tuvieran problemas, todos los que hay en una colonia, o en una delegación, pero que tuviera toda la actividad económica que tiene una ciudad”, pronuncia Itze González, co fundadora de Central de Muros en entrevista para Reporte Indigo de haber encontrado la CEDA y hacer la sinergia artística.
Actualmente Central de Muros se encuentra interviniendo 32 paredes desde septiembre pasado en la zona de Frutas y Legumbres, posteriormente iniciarán una segunda fase en marzo para hacer 16 murales más y en verano irán por la barda perimetral de la CEDA, donde alrededor de 70 artistas podrán dejar su huella en pintura.
Los promotores buscarán al finalizar la intervención ganar el récord Guinness a la galería al aire libre más grande del mundo, ya que la extensión total de toda la CEDA es de 327 hectáreas.
Creando arte en el mercado
Estar entre los pasillos de la Central de Abastos más grande del mundo, comer en su interior, platicar con los jornaleros, fueron algunos de los requisitos que les pidieron a los muralistas para que vivieran la cotidianeidad de este lugar y después presentaran sus propuestas visuales. Todos accedieron gustosos e inclusive se sintieron parte de la comunidad que mercadea en la delegación Iztapalapa.
“Los primeros dos días si hubo un rechazo, normal, somos agentes totalmente invasores a un espacio que tiene una actividad per sé, pero a los dos o tres días ya éramos parte, convivían con nosotros, de repente veían que estábamos a rayo de sol sudando demasiado y se acercaban con una botella de agua o nos regalaban nieve”, expresa la promotora artística.
González recuerda que al término de “Tlalli” de Gonzalo Areúz, se hizo una danza prehispánica para celebrar a la madre tierra, los comerciantes se incorporaron a la dinámica, rompiendo la cotidianeidad del entorno.
“Fueron cinco horas de estar danzando y la gente estuvo aquí a rayo de sol junto con los artistas y con nosotros, eso es crear comunidad y eso es tener un lazo que te hace pensar que no todo está perdido”, dice.
Artistas
1) Kenta Torii
2) Pogo
3) Root Rises
4) DONE BBC
5) atentamenteunafresa
Todos pueden pintar
Para las siguientes etapas cualquier muralista interesado puede entrar a la convocatoria de Central de Muros, la segunda fase cierra el ocho de marzo, solo basta contactarlos en sus redes sociales. Facebook y Twitter: CentraldeMuros
La armonía del color
Para González era importante que a través del color cambiará el entorno de la CEDA, creando una atmósfera que ayude el entorno caótico que se vive en este macro mercado capitalino.
“Al meterle color al espacio público y al traer que sea un poquito diferente el día a día de las personas, el que si ven lleno de camiones y de basura, pero de repente ven una obra de arte que es una explosión de color, la psique de las personas cambia”, comenta.
Algo distinto que la fundadora de Central de Muros ha notado en menos de seis meses es como ha bajado el flujo de basura alrededor de donde se encuentran las paredes intervenidas, por lo que se busca seguir auxiliando el espacio público con el arte gráfico.
“A dos meses de que se inauguró con el 35 aniversario (de la CEDA) sigue habiendo basura pero hay menos (…) si ahorita en dos meses bajó en un 30 por ciento la basura, quizá en seis lleguemos al 50 y esperando seguir así, conservar un espacio limpio”, argumenta.
La mayoría de los artistas urbanos que colaboran son mexicanos, solamente cuatro talentos internacionales han participado en la primera fase, siendo de Estados Unidos, Japón, España y Venezuela.
Generar política pública a futuro
Central de Muros empieza a tener una reacción positiva en la CEDA, en menos de un año pretenden terminar su proyecto por completo, pero su tercera fase será la más ambiciosa, el llenar de pinturas, dibujos e ilustraciones a la barda perimetral del mercado capitalino.
También uno de los propósitos es realizar un estudio a profundidad del impacto que los murales están generando, para impulsar leyes que ayuden a los muralistas a obtener incentivos económicos de maneras mucho más sencillas por parte del erario.
“El tema y la idea es llevar esto documentado al senado para crear una política pública en donde el arte y la cultura tengan espacio y derecho para tener un recurso (…) si nosotros comprobamos que este tipo de proyectos y que el arte acerca a ese tipo de restauración del tejido social, es mucho más fácil que políticamente puedas tú solicitar el fondo para realizar este tipo de proyectos” González. Cada fase está teniendo un costo aproximado de cuatro millones de pesos, fondos que la misma CEDA ha puesto en conjunto con la aseguradora Quálitas.
Llamado a Bansky
En el final de las naves industriales, ahí en la sección W-X, un pequeño stencil de la silueta de una niña dejando ir un globo en forma de corazón, más la frase “Bansky faltas tú aquí” se pretende invitar al ilustrador anónimo a que pueda venir a México a pintar un mural en la CEDA.