Si tienes antojo de algo dulce –o ácido– y no sabes qué comer, opta por la mandarina. Esta fruta de temporada no solo tiene vitaminas A y C, también es rica en ácido fólico y potasio.
Y además de ser refrescante para las altas temperaturas del verano, contiene nobiletina, que “previene de padecer obesidad y ofrece protección contra la diabetes tipo 2 y aterosclerosis”, de acuerdo a científicos de la Universidad de Western Ontario en Canadá.