Ansiedad: El mayor enemigo
El mayor enemigo de la salud en el siglo 21 es el estrés, pero hay otro factor más que va de la mano de éste y que además de enfermedades, aumenta el riesgo de una muerte prematura y acelera el envejecimiento celular.
Y es que la ansiedad es de esas enfermedades “invisibles” –psicosomáticas– que se distinguen por provocar síntomas diversos, pero sin ser necesariamente provocados por una enfermedad que se pueda diagnosticar.
María Alesandra PámanesEl mayor enemigo de la salud en el siglo 21 es el estrés, pero hay otro factor más que va de la mano de éste y que además de enfermedades, aumenta el riesgo de una muerte prematura y acelera el envejecimiento celular.
Y es que la ansiedad es de esas enfermedades “invisibles” –psicosomáticas– que se distinguen por provocar síntomas diversos, pero sin ser necesariamente provocados por una enfermedad que se pueda diagnosticar.
Además, después de sufrir ansiedad, las personas pueden desarrollar problemas tales como trastornos cardíacos y digestivos, se les contraen los músculos y les dan calambres, también les pueden provocar dolor de espalda, hombros y cuello.
Y en algunos casos, también se disparan malestares como migraña.
De hecho, expertos del Instituto de Cáncer del Washington Hospital Center declararon que la prevención y el control del estrés son la única forma para evitar una muerte prematura y la mejor manera para poder “llegar a viejo lo más joven posible”.
No te lo lleves
Después de un día pesado, lleno de pendientes, juntas y problemas de todo tipo, las personas suelen llegar a su casa a desquitarse con su pareja y sus hijos. O con sus amistades y hasta con los vecinos.
Esto se debe a que se llevan el estrés laboral al hogar y porque no logran separar los problemas personales de los profesionales.
Al llegar a casa sin relajarse o sin poner en práctica alternativas para reducir el estrés, las personas le gritan a los pequeños y lo menos que quieren es ver a la pareja, de acuerdo a Psychology Today. Cada vez son más las personas que acuden a terapia para encontrar la manera de deshacerse del estrés, con el fin de no dañar a sus familias.
Entre los sentimientos más comunes que presentan las personas que trasladan el estrés de la oficina a la casa, son frustración, mal humor, desesperación, falta de paciencia y tolerancia.
Un estudio de la Universidad de Florida determinó que aquellas personas que son maltratadas en su trabajo o que sufren de bullying, acoso o inclusive “las hacen menos” sus compañeros y superiores, poco a poco pierden la capacidad para manejar sus emociones y sobrellevar tiempos de crisis. Y eso se refleja en la dinámica que viven en el hogar.
El mencionado estudio concluyó que cuando la persona hacía ejercicio y dormía bien, sí disminuyen naturalmente sus niveles de estrés y ansiedad.
Así que no se necesitan fármacos o saber magia para “contar hasta 10” y relajarse.
Yoga para tranquilizarse
El yoga ayuda a liberar el estrés y prevenir el envejecimiento, de acuerdo a una investigación divulgada por Oxidative Medicine and Cellular Longevity.