Para Karin Michels, directora del Instituto para la Prevención y Epidemiología de Tumores de la Universidad de Friburgo y profesora de la Universidad de Harvard, el aceite de coco es “uno de los peores alimentos que se pueden ingerir” porque es “puro veneno”.
Estas declaraciones las hizo durante su conferencia titulada “Aceite de coco y otros errores nutricionales” en la que explicó que basa sus críticas en los ácidos grasos que contiene el aceite de coco, pues asegura que es tal la cantidad que aporta que puede llegar a obstruir las arterias.
Las mismas han sido muy polémicas y diversos especialistas y medios especializados en el tema han contestado y debatido sus argumentos.
Conscien Health aclara que la American Heart Association recomienda que las personas eviten demasiadas grasas saturadas. Dice que una cucharada de aceite de coco tiene 11 gramos y lo recomendado es no consumir más de 13 gramos por día. Pero, es demasiado fuerte asegurar que el aceite de coco es veneno.
Lo cierto es que la verdad de las grasas y la salud es compleja. Muchas personas consideran que las grasas saturadas son completamente malas, pero no, también son buenas.
El cuerpo no necesita de las grasas trans, cualquier cantidad puede ser dañina, pero otra tipo de grasas sí son necesarias y así lo demuestran diversos estudios al respecto. Por lo que llamar a un producto “veneno” por contener grasas es aventurado.
Para el experto en alimentación Julio Basulto, el aceite de coco no es “ni superalimento, pero tampoco es “veneno”.