A cuidar los riñones
Los riñones son órganos vitales para el ser humano, ya que entre sus funciones para el organismo están remover los desechos y exceso de fluidos, regular el ácido en el cuerpo y estabilizar la presión sanguínea
Indigo StaffDe acuerdo a una investigación publicada en la revista científica The Lancet, elaborada por expertos de la Universidad de Erlangen-Nürnberg en Alemania, el 10 por ciento de la población mundial tiene una enfermedad renal crónica (ERC).
Y es que la ERC es una de las consecuencias derivadas de la diabetes y la hipertensión arterial, que son de las principales causas de muerte en México.
De hecho, de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), hay alrededor de 9 millones de mexicanos que padecen alguna enfermedad relacionada con los riñones. Al año, 12 mil 700 mexicanos mueren por causas relacionadas a dichos órganos vitales.
Tanto a nivel nacional –como global– los casos de niños y jóvenes con insuficiencia renal crónica van en aumento, según señalaron expertos en el Primer Congreso Latinoamericano de Organizaciones Renales.
Ésta es la más grave de las enfermedades renales, ya que se debe tratar con diálisis y en casos extremos se requiere de un trasplante.
Los más vulnerables a ello son las personas que tienen presión alta y aquellas que padecen diabetes.
¡Son vitales!
Los riñones son órganos vitales para el ser humano, ya que entre sus funciones para el organismo están remover los desechos y exceso de fluidos, regular el ácido en el cuerpo y estabilizar la presión sanguínea.
Para cuidar de la salud renal se recomienda consumir frutas como sandía (de preferencia fresca), ya que ésta limpia los tejidos y la sangre en el cuerpo.
A su vez, se aconseja el bajo consumo de grasas que aumentan el colesterol. Y, claro, se recomienda beber agua constantemente (a excepción de las personas cuyo problema renal provoque que orine poco).
Y como muchas enfermedades, evitar el tabaquismo es clave para mantener sanos a los riñones, ya que el cigarro disminuye la cantidad de sangre que llega a los mismos y aumenta el riesgo de que se desarrolle cáncer de riñón.