85 años del INAH. ¿Cuáles son sus rezagos y desafíos?

El instituto es la columna vertebral de la investigación arqueológica en el país. Investigadores y ex funcionarios llaman a fortalecer su presupuesto para dar mantenimiento a su infraestructura cultural en todo el país
Abida Ventura Abida Ventura Publicado el
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En 85 años de vida, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se ha consolidado como la columna vertebral de la investigación arqueológica, paleontológica, antropológica e histórica en el país. Es también una institución diversa y compleja por la cantidad de áreas y tareas que administra, por lo que en la actualidad enfrenta distintos desafíos, como fortalecer su presupuesto para resolver la falta de seguridad laboral de sus trabajadores, así como la falta de mantenimiento de sus instalaciones y de los cientos de museos y sitios que administra en todo el país.

Investigadores y ex funcionarios del  instituto, así como  especialistas externos llamaron a atender esos rezagos en un conversatorio conmemorativo realizado el pasado jueves en el Museo Nacional de Antropología, en el marco de la 35 Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia (FILAH).

En ese encuentro, donde estuvo presente el director del INAH, Diego Prieto,  también se subrayó la importancia de mantener la autonomía del instituto, así como de establecer herramientas que permitan que los proyectos puedan trascender los sexenios.

“La verdad, el deterioro de la infraestructura cultural, no solo del INAH, en tantos años de poca inversión es impresionante y es costosísimo, tanto en el desempeño de la propia institución como en términos de patrimonio. Es un patrimonio muy grande el que México tiene en su infraestructura cultural y creo que mientras falte el rubro de mantenimiento en la elaboración de los presupuestos federales, hay una falta de realidad. Mantener cuesta. La tarea del INAH, obviamente, es mirar por todo ese patrimonio”, manifestó María Teresa Franco, ex directora del INAH.

La historiadora, quien ha ocupado dos veces la titularidad del instituto, dijo que  “el INAH, en su gobernanza, nunca compra banderas políticas” y agregó que, en el contexto de cambio de sexenio, el gobierno entrante debe ver cómo sustituir mecanismos que desaparecieron con la llegada de la Cuarta Transformación, como un fideicomiso que estaba destinado a la compra de predios arqueológicos.

El gobierno tendrá que buscar cómo van sustituir mecanismos, que algunos podrán llamar neoliberales, pero que daban certezas del futuro, como lo que fue el diseño del FONCA, de los Fideicomisos que apoyaban la adquisición de predios arqueológicos, quizá cambie de forma, pero el gobierno tiene que asegurar de qué manera los proyecto pueden trascender los sexenios”.

Más presupuesto y mirar hacia una transformación

En el diálogo, donde también participaron el historiador Salvador Rueda Smithers, el antropólogo Manuel Gándara Vázquez y el especialista en cultura Eduardo Nivón, la antropóloga social Maya Lorena Pérez puso énfasis en la necesidad de fortalecer el presupuesto del instituto, para resolver su déficit histórico y, sobre todo, resolver la falta de seguridad laboral de su personal, el mantenimiento de sus instalaciones físicas, así como “revertir el creciente sometimiento de su operación a una administración que actúa en demérito del cumplimiento de sus tareas sustantivas, lo cual se expresa en los bajos montos destinados a la investigación, en las engorrosas formas de comprobación y facturación y el excesivo control burocrático de los investigadores que trabajan en campo”.

Por su parte, el gestor cultural Eduardo Nivón, llamó a ver hacía dónde debe ir la transformación del instituto, ya que, al igual que el patrimonio cultural está en constante cambio frente a los contextos sociales y políticos.

Reconoce rezagos y subraya logros

Presente durante el evento, el director del INAH, Diego Prieto,  reconoció que el INAH enfrenta rezagos, pero dijo que también tiene liderazgo y el reconocimiento de la sociedad: “Es un momento, tanto de fortalecimiento como de liderazgo, puede ser que falten cosas, efectivamente hay rezagos, a veces en algunos sanitarios, no hay papel de baño, pero inmediatamente se resuelve el problema. Lo que sí creo es que el instituto está en la mirada de la sociedad y de los distintos niveles del gobierno”, subrayó.

Destacó, además, la instalación de los Consejos de Área y la promulgación del Reglamento de su Ley Orgánica, que se publicó en 2021.

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