Con los objetivos de proponer, más que de protestar, y de inspirar, más que de asustar, Cinema Planeta celebró una edición más de su Festival Internacional de Cine y Medio Ambiente, que reunió lo mejor de la cinematografía sobre estos temas.
Este año, dadas las circunstancias, decidieron adaptarse y lanzar todo su contenido de manera virtual a través de ideaplaneta.com, plataforma que ya venían trabajando desde antes de la pandemia para ofrecerle más contenido a su público durante todo el año, y no sólo lo que dura el festival.
Y es que su compromiso va más allá de sólo ser una plataforma de películas, ya que están comprometidos al 100 por ciento con la educación ambiental, por lo que la nueva plataforma contará con contenidos y actividades todo el año que se diferenciarán de su emblemático festival.
“Este año para la plataforma lo que hicimos fue una retrospectiva de los otros 11 años del Festival y quisimos invitar a las películas que tuvieron mayor impacto, es decir, aquellas que provocaron una acción ciudadana, que se convirtieron en los proyectos que impulsaron acciones que mucha gente repitió”, aseguró Eleonora Insunza, codirectora de Cine Planeta.
Una historia de logros de Cinema Planeta
Voltear al pasado y recordar todo el material que ha sido parte del Festival Internacional de Cine y Medio Ambiente, le permitió al equipo de Cinema Planeta darse cuenta de cómo han logrado incidir en generaciones de niños que hoy ya son adultos.
“Nos dimos cuenta en estos 11 años de llevar conciencia, de hablar con niños, de trabajar y colaborar con científicos, investigadores y activistas, que ahora en estos días es muy importante dar herramientas para que la gente pueda actuar”, dice Insunza.
Si bien, el éxito de un festival podría medirse en el número de asistentes y cuántos estrenos tuvo, Eleonora comenta que dentro de sus logros también está el haber incidido en la cinematografía nacional.
“Nos da mucho gusto que de tener dos películas nacionales el primer año, ya en el quinto tuvimos la sección ‘Tierra’ que fue destinada sólo a cine nacional y en el décimo ya pudimos abrir la competencia nacional, es decir, ya tuvimos dos secciones del festival que son completamente de cine mexicano dedicado al medio ambiente”, platica la codirectora.
Nahui Ollin, Sol de movimiento fue un material que produjo el festival y que cuenta la historia, a través de diferentes cortos, de comunidades que ya se están enfrentando al cambio climático y a sus efectos.
“Hace tres años todavía las películas trataban de explicar o encontrar argumentos para sostener que el cambio climático era real o no, ahora nos muestran qué podemos hacer ante este fenómeno”, dice Insunza.
El equipo de cinema Planeta sabe que las pequeñas acciones se convierten en grandes cambios, por lo que seguirá con su labor de difundir la importancia de la educación ambiental, porque el momento de actuar ya llegó.
“Necesitaos salir de este confinamiento haciendo cambios positivos, somos lo suficientemente poderosos para poder hacerlo y generar transformaciones importantes”, afirma Eleonora.