Venezuela defraudada

¿Cómo olvidar cuando, si mal no recuerdo, Jorge Ubico, dictador guatemalteco, dijo haber ganado las elecciones con más de 2 millones de votos a favor y cero votos de sus opositores en contra, ya que ni siquiera sufragaron por ellos mismos, sino por ese truhán que, entre otros, destruyó la economía de nuestro vecino del sur.

Francisco Martín Moreno Francisco Martín Moreno Publicado el
Comparte esta nota

¿Cómo olvidar cuando, si mal no recuerdo, Jorge Ubico, dictador guatemalteco, dijo haber ganado las elecciones con más de 2 millones de votos a favor y cero votos de sus opositores en contra, ya que ni siquiera sufragaron por ellos mismos, sino por ese truhán que, entre otros, destruyó la economía de nuestro vecino del sur.

Ahora resulta que en las elecciones que se llevaron a cabo en Venezuela el domingo pasado, otro troglodita, Hugo Chávez, extraído del paleolítico tardío, resultó vencedor en las elecciones cuando la economía venezolana se encuentra severamente lastimada ante la falta de empleo provocado por la deserción de la inversión local privada y foránea, además de una inflación sofocante, una criminalidad incontrolable, el peso de la deuda externa contratada con China, un gasto público desbridado, sumado a un control de cambios que han creado un alarmante déficit fiscal, a pesar de que cuando Chávez llegó al poder el oro negro se cotizaba a una décima parte de su valor actual. ¿Qué sería de Chávez y de Venezuela sin sus manantiales petrolíferos? Tal pareciera ser que, al igual que a México, esos veneros nos los escrituró el diablo…

El 7 de octubre Capriles ganó sobradamente los comicios, solo que su triunfo jamás será reconocido por los militares venezolanos que entienden el presupuesto público como un botín a disputárselo entre hienas hambrientas. Fue muy claro el mensaje que le transmitieron al candidato vencedor, opositor de Chávez:

“Tenemos tomada Venezuela. Las tanquetas y la tropa que ves en la calle son la evidencia de que en este país no se mueve una sola hoja sin nuestro consentimiento. Si sales con que ganaste las elecciones y llamas a un movimiento nacional para que se respete el voto, ten por seguro que estallará una nueva revolución en Venezuela, que se derramará la sangre empezando por la tuya y la de tu familia. Sí, sí ganaste, pero de ahí a que te entreguemos el poder a ti o a nadie, eso lo puedes olvidar. Te pedimos, por amor a la patria, que reconozcas tu derrota civilizadamente ante los medios de difusión o estallará la violencia. El ejército tiene el monopolio de la fuerza, no lo olvides.”

Llama la atención que la mayoría de los medios de difusión internacionales hubieran aceptado el triunfo de Chávez, quien se proyecta para cumplir 20 años en el poder si la salud se lo permite, como si se tratara de la democracia inglesa, cuando en realidad estamos frente a un secuestrador de la inmensa mayoría del pueblo venezolano. ¿Quién cree en las elecciones que Fidel Castro, otro torturador de la democracia, ha llevado a cabo en Cuba? 

¿Cómo es posible que exista un país rico con gente pobre? Venezuela cuenta con petróleo, litorales, tierra fértil, ganadería, sí, pero también con Vicente Gómez, Pérez Jiménez o Andrés Pérez, a quién los venezolanos volvieron a reelegir en forma inexplicable. ¿Existen las culpas absolutas?

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil