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Un par de minutos después del golazo de “RAFA” que marca el camino para la victoria sobre Croacia, metiéndonos a la fase de nocaut de este Brasil 2014, mi mente y mi cariño por el “Chepo” me hizo reflexionar por un momento, ¿en dónde y cómo estará viendo este partido?
O quizá comentará en ese momento con alguien de toda su confianza, cómo es que nunca lo convocó al Tri, quizá habló con él pero no lo llamó.
Puede ser que la prudencia y algunos antecedentes por su mal paso en el Red Bull de Nueva York, le hayan hecho intuir que ya iba de salida, que su carrera estaba en declive, que no llegaría entero al Mundial.
A lo mejor tuvo la tentación al ver que los líderes naturales como Gerardo Torrado fallaban, quizá siempre confió en que los que pasaban por mal momento, que eran un montón, recuperarán su nivel.
O tal vez fue su su empecinamiento y terquedad los que le traicionaron, el empecinarse a no cambiar el rumbo, a dejar fuera a quienes como Guardado, “Chicharito”, “Gio”, vivían al 30 por ciento de su nivel y hacer cambios radicales, y romper tendencias y presiones mediáticas para jugársela (lo señalamos muchas veces) con ORIBE en lugar del “CHICHARITO” a la baja.
Quizá al momento del gol de “RAFA” surjan en “Chepo” sentimientos encontrados.
Nuestra Selección avanza en Brasil 2014, pero con otro técnico, otro sistema, otro estado anímico, otra convicción, otras ideas y algunos otros jugadores.
¿Y por qué con ‘Chepo’ no?
No dudo que al ver jugar al TRI aparezcan entonces las respuestas a las muchas dudas que aparecieron a medida que nuestro TRI se hundía en el marasmo del Hexagonal.
Aquellas frases de “no es obligación, es compromiso”, deben retumbarle los oídos de vez en cuando.
Varios de los que hoy festejan en el TRI le fallaron al “Chepo” en su momento, Guardado, “Gio”, “Chícharo”, Herrera y hasta la frustración que era un secreto a voces de “Memo” Ochoa y otros por no ser considerados para jugar en aras de esa chocante devoción por los “europeos” estén como estén, por mencionar a algunos.
Tal vez reconozca en su círculo íntimo su terquedad, su estar a la defensiva con los medios o cuestionamientos generales, principalmente en el tema de no arriesgar con variantes de inicio y en el transcurso de los partidos.
El llamar siempre a una base cómoda y aburguesada llena de europeos que no jugaban, a lo mejor saber que tenía que hacer un revulsivo llamando a otros que llegaran con hambre y se mataran en la cancha sin garantizarle nada a nadie.
A Miguel Herrera eso le catapultó hasta dónde hoy se encuentra, pero nunca lo hizo, muchas incógnitas que solo “CHEPO”, “EL FLACO”, “CHAVA” REYES y NICOLÁS NAVARRO saben de a una. Lo que sí me queda claro, clarísimo, es que la lección es dolorosa hasta la médula, que la herida se abre en cada partido de nuestro TRI, pero que seguramente esta lección está más que aprendida y que muy pronto regresará a jugársela y a ganar.
El “Fut” es de revanchas, el “FLACO” TENA ya tuvo la suya, a “Chepo” capacidad y agallas le sobran, pronto estará de regreso y seguramente con más madurez, humildad y sapiencia, porque el liderazgo y lo ganador lo trae en los genes, solo que en estos días las heridas sangran aunque sea un poquito, somos humanos…
Los traiciona el divo
Italia es el país del drama, ahí no hay indiferencia, todo pasa por los extremos, es la plenitud del “Bel Canto” y la Ópera dramática.
La vida en Italia es así, la política, la economía, la vida social y afectiva se vive mayormente entre pasiones y emociones.
Su futbol no puede ser diferente, así han ganado cuatro Mundiales, así se han ido en ocasiones por la “Vía de la Vergüenza” solo para resurgir de sus fracasos y dolores como el Ave Fénix, de sus propias cenizas.
Así llegaron a Brasil 2014 y así se van de aquí, en partidos tremendos, llenos de drama y hasta sufrimiento, apostándole en esta ocasión todo a un héroe monumental, espléndido jugador, figura propicia para los escultores de la Escuela Tradicional Italiana, una estatua viviente de mármol negro: MARIO BALOTELLI, el Divo del Milán, que vive su propia vida individual y egoísta en el deporte – espectáculo de conjunto por autonomasia.
El futbol es cosa de 11 individualidades orientadas todas hacia una meta común.
Balotelli va en contra de esta regla y sus portentosas facultades hacen que los técnicos se rindan ante sus caprichos y veleidades.
Él hace su propio espectáculo, canta sus propias arias fuera de tiempo, fuera de tono, es aberrante su egoísmo, personalismo, el mundo gira a su alrededor e incluso sus más cercanos, que no sus compañeros, le hacen caravanas.
Tiene la onza de oro en la mano para cambiarla en cualquier momento, solo que él lo decide.
Y esta vez decidió hacerse a un lado sin aportar su enorme talento al servicio del grupo, de la idea colectiva, sus 10 compañeros se mataron en la cancha, él solo hizo que se mataba de a mentiritas por si nuestro árbitro mundialista, “Chiquimarco” Rodríguez le compraba la actuación.
Ser o no ser…
Esta frase es del HAMLET de Shakespere, no de la Divina Comedia de DANTE o del maravilloso Rigoletto de VERDI, o la enorme Tosca de PUCCINI, solo que para el técnico italiano Cesare Prandelli, esta es la frase que mejor le viene.
Jugar este Mundial apostando a adaptar el juego al enorme talento de este Divo goleador del “fut”, llamado Mario Balotelli, o asumir el riesgo de buscar una variante diferente con el riesgo de fracasar.
Cuando se tiene un jugador de esa clase hay que tenerlo, convencerlo, utilizarlo y volverlo a convencer, seguramente esto le falló aquí.
