Un trago de Jamaica

Nada más lejos de la realidad, este es un partido eliminatorio y hay que jugarlo con la máxima concentración y principalmente humildad. El título olímpico está ya en nuestras vitrinas y hoy hay que enfrentar lo que sigue.

No es un trago de Jamaica

Alfredo Domínguez Muro Alfredo Domínguez Muro Publicado el
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Nada más lejos de la realidad, este es un partido eliminatorio y hay que jugarlo con la máxima concentración y principalmente humildad. El título olímpico está ya en nuestras vitrinas y hoy hay que enfrentar lo que sigue.

No es un trago de Jamaica

Cierto que los caribeños vienen para abrir el Hexagonal Final a los 2 mil metros de altura de la Ciudad de México y con un futbol carente de figuras e imaginación. Sin embargo, la historia nos dice que estos partidos que parecen fáciles suelen convertirse en difíciles, precisamente porque los jugadores salen pensando que con la camiseta ya vamos 1-0 arriba, después de los himnos ya tenemos dos, al silbatazo inicial y las tres primeras llegadas de los nuestros ya deberíamos tener cinco, de esto seguramente ya hemos aprendido desde hace rato, quizá sea la razón por la que mucha gente dice que nuestra Selección luce más contra rivales de alta jerarquía, vamos, con los pesos completos, que con rivales de nuestra área de Concacaf, cuyo palmarés no es para asustar a nadie, y si bien hoy el futbol de Jamaica mira para arriba a nuestro fut, ese es precisamente el gran peligro al que se enfrentan los nuestros esta noche y desde luego…

El reto del “Chepo”

En obligar a sus jugadores a mantener los pies en el piso para salir con humildad a comerse la lumbre a puños, ahogar al rival y buscar asegurar el resultado, si no en los primeros cinco minutos, que sea en el silbatazo final. Ayer el “Chepo” fue muy concreto en su declaración al señalar que van a tener paciencia tomando en cuenta que el rival saldrá a buscar, no solamente que no lo vayan a golear, sino por ahí sacar un puntito de oro que sería para ellos y quizá se reditúe, sin tomar riesgos, a encontrar un gol porque al fin y al cabo son 11 contra 11.

El camino es largo

De acuerdo a las condiciones del Hexagonal Final nos vimos beneficiados para recibir en casa al primero de nuestros rivales. Si nos comparamos por ejemplo con la Selección de Estados Unidos que a las tres de la tarde en el calor infernal en medio de las palmeras y cañas de azúcar de San Pedro Sula, se van a meter al infierno en chiquito y por esta razón seguramente Jurgen Klinsmann apostó por 17 jugadores que no están participando en la MLS, entre ellos Hércules Gómez y nuestros dos gringos: Torres y Castillo, buscando precisamente jugadores que no se arruguen a la hora de meter la pierna porque Honduras tendrá como única ventaja en este larguísimo Pre-mundial, el meter a los rivales en casa con un público que aprieta mucho, no sólo al rival sino también a los árbitros. Y por ahí la visita de Costa Rica a Panamá, es como para irse con el cuchillo entre los dientes, tomando en cuenta que los panameños hicieron un excelente cuadrangular, mientras que Costa Rica calificó de lágrima, ustedes lo recordarán, en el grupo en el que nosotros calificamos metiendo tercera y con carretera planita.

El trago de Jamaica

Conste que para los que nos gusta el agua de Jamaica, se sirve en dos versiones: una más o menos amarga y la otra con azúcar y cargadita. Si hacemos este comparativo esperamos tomarnos un buen vaso de Jamaica en un trago largo de esta segunda versión, porque bien visto, los jamaicanos como cualquiera de los otros cinco rivales que vendrán al Azteca, lo van a hacer con la conciencia de buscar, encerrándose, el resultado que para todos nuestros visitantes sería positivo de un empate hacia arriba. 

Por esta razón ese trago de Jamaica habrá que tomarlo con 11 jugadores convencidos precisamente de lo anterior y aquí ni las camisetas, ni los blasones cuentan, solamente la determinación, pierna fuerte, concentración y mucho trabajo a lo largo de los 90 minutos y más por lo que agregue el árbitro.

Nuestro título olímpico

Esta que sin duda es la máxima hazaña del deporte mexicano deberá servirnos para obtener la seguridad que con trabajo, disciplina, dedicación, compromiso de entrega y derrochando energía, podemos llegar a metas muy altas. Si aquél último triunfo fue ante Brasil en Wembley, hoy con los pies en la tierra hay que vencer al rival más importante, que es el de turno, en este caso Jamaica.

Así las cosas pues, ¡Salud! para que sea un muy provechoso trago de Jamaica… Así de fácil.

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