Nos encontramos cubriendo el Festival SXSW 2014 en Austin, capital de Texas; este evento se ha caracterizado desde su origen en 1987 por presentar innovaciones, primero fue la música la disciplina preponderante, después se agregó cine y más recientemente medios interactivos.
Se dedican tres días para tratar asuntos relacionados con medios, y aunque todos pueden ser desmenuzados, en esta ocasión se habló principalmente de televisión, su entorno actual y su posible camino de cara al futuro.
Una de las conferencias que más llamaron la atención fue una que se llamó #TVornotTV, parodiando la frase shakespeariana que en inglés reza: “To be or not to be”, ser o no ser en español. Pues en Estados Unidos “la tele” está sufriendo cambios drásticos, tanto en su manera de producirse, como de distribuirse y por supuesto, de consumirse.
Y aunque nos encontramos a varios años de lo que sucede del otro lado de la frontera, siempre es importante conocer las tendencias que el mercado más poderoso del mundo ofrece.
Brian Stelter, reportero senior de CNN; John Skepper, presidente de ESPN/Disney; Kevin Conroy, de Univisión; y Paula Kerger, de PBS, ofrecieron un estupendo panel, en el que dialogaron con periodistas y personas interesadas, provenientes de varias partes del mundo, acerca de su visión sobre la TV.
La primer frase célebre se la llevó Skepper cuando aseguró “TV es una palabra sucia, es una mala palabra… Nosotros usamos pantalla, en lugar de TV”. Refiriéndose a que ellos (ESPN) son los líderes en el secundary screen, es decir, transmisión vía Web y apps nativas, con el 98 por ciento de su contenido visto en vivo, “live”.
Por su parte, Paul Kerger, aseguró que “las personas tienden a ver las pantallas más grandes a las que tienen acceso, cada medio tiene sus propios atributos”. Por eso es que ellos (PBS) han encontrado shows que se adaptan al ecosistema multimedia, con shows nocturnos como “Downton Abbey”.
Kevin Conroy sostuvo que “el reto es crear una manera fácil de que todos los usuarios puedan accesar a contenido en cualquier plataforma”. Es decir, alcanzar el punto en el que la experiencia de ver TV por Internet y en dispositivos móviles, deberá ser tan fácil como cuando llegábamos a casa y prendíamos el televisor; sin contraseñas, usuarios y otros candados, que provocan migración de usuarios a sitios como YouTube.
Este reto no solo le pertenece a los creadores de TV, sino a los distribuidores, pues son ellos los que obtienen la misma cantidad de ganancias por llevar los contenidos a usuarios con gustos y características cada vez más diversas.
También fuimos testigos de otra conferencia no menos interesante, la que ofreció Roy Sekoff de Huffington Post Live, la propositiva televisora vía streaming de Arianna Huffington. En su charla llamada: “Is online video killing TV?” o “¿El video en línea está matando a la TV?” Sekoff lo niega, sencillamente dice, existen ciertos contenidos que terminan en un ecosistema distinto, no por ello mejor o peor. Ellos cuentan ya con 17 mil personas que han participado “en vivo”, vía fibra óptica, y 22 millones de vistas únicas al mes.
El común denominador de las dos conferencias es que la TV no morirá, solo tiene que adaptarse a los nuevos entornos mediáticos, pero principalmente a una nueva clase de usuario que día a día pide más y mejores propuestas de contenidos, y que si no los encuentra en la TV convencional, prende su computadora o su celular y ahí se queda.