El Vaticano tiene una extensión de 0,439 km cuadrados y una población de aproximadamente 900 habitantes, es el país más pequeño del mundo, lo importante es que alberga la Santa Sede, máxima institución de la Iglesia Católica.
Resulta que la máxima autoridad del Vaticano y Jefe de Estado del mismo es decir el Papa, el Sumo Pontífice –algo totalmente inusual en esta época– renunció y el mundo entero testificó la elección de su sucesor Francisco quien será guía directo del 17 por ciento de la humanidad y líder moral indiscutible del mundo entero.
Se ha dicho de todo respecto de la elección, me quedó con la frase de un Cardenal que afirmaba hace días: “Dios ya eligió al nuevo Papa, nuestro trabajo en estos días es entender bien a quién ha elegido Dios”
El ahora Papa emérito, Benedicto XVI con más de 2 millones de seguidores en su Twitter, en el lapso de pocas semanas, se despidió de este modo de sus seguidores el 28 de febrero: “gracias por vuestro amor y cercanía, que experimentéis siempre la alegría de tener a Jesucristo en vuestras vidas”
Pero el Vaticano no es Elba y la historia es otra. Elba, en el vació que ella misma se fabricó, tras las rejas llena de gozo a medio México.
A sus apenas 2 mil seguidores en Twitter les escribía días antes de su arresto: “si yo me voy hay otros que pueden dar la pelea”. La pelea la dio –y bien dada– el actual Gobierno. Entre las 25 personas a las que ella seguía en su Twitter encontramos a Vicente Fox, Gabino Cué, Moreno Valle y Jorge Kahwagi, el boxeador, supongo yo, solo por mencionar algunos.
Del Barcelona no diremos mucho porque ha vuelto a ganar. Nos queda claro sin embargo que es noticia y de que siendo excelente equipo le hace falta un líder. En su twitter cuenta apenas con 7 mil 725 seguidores.
Y hablando de líderes aunque bananero, el fallecido Hugo Chávez que en paz descanse, ha ocupado espacios en la prensa. Aquel que suplicaba a amigos y médicos días antes de su despedida: “no me dejen morir”. El 18 de febrero se despedía de sus 460 mil seguidores en Twitter: “sigo aferrado a Cristo y confiado en mis médicos y enfermeras”, pero al parecer Cristo pensó de otro modo.
Si el bananero de Chávez escribió su historia, el bandido de Granier, con 73 años encima está por concluir la suya. A sus 296 seguidores de Twitter les decía en su último tuit el 13 de octubre de 2010: “he tenido errores”. Granier seguía sólo a 22 personas entre las que predominan priistas públicos.
No es el bananero ni el bandido. Puede en cambio ser el valiente; con millón 679 mil seguidores en Twitter, el valiente en solo 100 días dio pasos que sus antecesores en 2,190 días no dieron: encerrar a Elba y una necesaria ley de medios. De qué modo ha crecido y cómo se han empequeñecido sus antecesores.