Después de escuchar el último mensaje de Felipe Calderón, no queda más que concluir que está convencido de que es el Salvador de México.
En materia de seguridad, el presidente reveló que antes de la “Era Calderón”, el país estaba “inmerso en una dinámica perversa que podría resumirse así: la evolución del fenómeno delictivo y la involución de las instituciones encargadas de combatirlo”.
Sin embargo, toda esta perversidad se acabó cuando llegó Salvador Calderón.
¿Será por eso que en el sexenio de Fox hubo 60 mil homicidios, mientras que en los primeros cinco años del calderonismo la cifra se elevó a más de 100 mil?
Y en lo económico, Felipe Calderón afirmó que México era la envidia del mundo, ya que antes de la presente administración, “el crecimiento económico había sido insuficiente para crear empleos y abatir los rezagos sociales”.
Claro, hasta que llegó Salvador Calderón y logró “estabilizar la economía para lograr una expansión de casi el 16 por ciento desde la segunda mitad de 2009”.
¿Será por eso que el crecimiento económico de este sexenio ha sido el más bajo de los últimos cuatro sexenios? Durante el gobierno calderonista, la economía creció menos de 12 por ciento.
¿Será por eso que en este sexenio hay por lo menos 12 millones más de pobres según el Coneval?
De la Fuente con Peña
Los que tienen acceso a información ultrasecreta dicen que una de las negociaciones más discretas que está llevando a cabo el equipo del presidente electo es la que busca integrar a Juan Ramón de la Fuente al gabinete de Enrique Peña Nieto.
Si el ex rector de la UNAM llegara a aceptar una posición, sería una bomba para la causa de Andrés Manuel López Obrador, ya que era una de las cartas fuertes del tabasqueño.
Licencia para matar
Ahora resulta que cualquier vehículo que se tope con un retén de individuos armados con ametralladoras AK 47, tiene la obligación de pararse, so pena de ser ametrallado por error, según Luis Cárdenas Palomino, jefe de Seguridad Regional de la División de Seguridad de la SSP federal.
El lugarteniente de Genaro García Luna afirma que los policías federales que emboscaron el vehículo de la Embajada de Estados Unidos se habían disfrazado de delincuentes para matar a un grupo de secuestradores.
Como los estadounidenses que viajaban en la camioneta diplomática no sabían que quienes parecían delincuentes eran policías, ni los policías disfrazados de delincuentes estaban al tanto –supuestamente– de que quienes iban en la camioneta no eran secuestradores, los unos no se pararon, y los otros les dispararon.
Con esas explicaciones, para qué queremos confusiones. Lo único que queda claro es que fue una emboscada.
Por cierto, el único secretario de Estado que fue tomado en close up por las cámaras del Centro de Producción de Programas Informativos Especiales (Cepropie) durante el informe, fue Genaro García Luna.
Golpe de timón
El que sorprendió ayer fue el almirante Francisco Saynez, quien pidió a Enrique Peña Nieto, y no al todavía comandante supremo Felipe Calderón, que cambiara la estrategia de la lucha contra el narco utilizando más inteligencia y menos elementos de las fuerzas armadas en las calles.
“Eso es lo que se debe privilegiar y, por supuesto, tratar que haya lo menos de violencia, bajar la violencia, evitar utilizar masivamente, quizá, las fuerzas armadas. Tienen que ser grupos más selectos, es lo que yo pienso, y ojalá así suceda”, dijo Saynez.
No estaría mal que el secretario de Marina aclarara si alguna vez le hizo una sugerencia similar a Felipe Calderón.
