Redes de Poder: Una rendija para la reforma electoral
Tal parece que entre algunos integrantes del grupo parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados se empiezan a hacer cálculos para intentar llevar al pleno, e incluso aprobar, la iniciativa de reforma político-electoral propuesta por el presidente de la República, y que ha sido rechazada por los partidos de oposición. Nos dicen que los […]
Redes de PoderTal parece que entre algunos integrantes del grupo parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados se empiezan a hacer cálculos para intentar llevar al pleno, e incluso aprobar, la iniciativa de reforma político-electoral propuesta por el presidente de la República, y que ha sido rechazada por los partidos de oposición. Nos dicen que los de guinda están muy atentos a la ruptura cantada entre el PRI y el PAN, tras la presentación de una iniciativa tricolor para ampliar cuatro años la presencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad, para medir si los diputados tricolor se sumarían, ya sea en bloque o en casos particulares, al respaldo a la propuesta de reforma electoral. Eso sí, en donde no ven que les salgan las cuentas es en el Senado de la República, donde el grupo parlamentario del PRI no está en la labor de abandonar el llamado bloque de contención, nos dicen.
Fecha de caducidad
Y quien oficialmente ya le puso fecha a la casi consumada ruptura de la coalición Va por México fue el dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano, quien en entrevista radiofónica el día de ayer mencionó que el martes 13, durante la votación de la iniciativa de la discordia en comisiones de la Cámara de Diputados, se podría poner el último clavo al ataúd de la alianza, dependiendo del actuar de los legisladores priistas. A estas alturas ya ni con las reuniones privadas que han sostenido los dirigentes, ni los llamados de importantes actores políticos, parecen poder revertir el divorcio. Ahora solo falta ver quién será el primero en anunciarlo.
La gira del adiós
Enfocado en su próximo proyecto político y ahora recién nombrado presidente de la Copago, el aún gobernador Alejandro Murat parece ya haber dejado en un segundo o tercer plano la administración de su estado, Oaxaca, y ha delegado prácticamente todo para los últimos tres meses de su sexenio, para dar prioridad a su proyecto de buscar la dirigencia nacional tricolor y/o construir una posible candidatura presidencial para 2024. El problema, además de la falta de gobernabilidad, es que, nos dicen, el equipo del gobernador electo, Salomón Jara, ha batallado mucho con los designados por el mandatario para la transición de gobierno, porque ya prácticamente se ha perdido el interés por lo que aún le queda al gobierno de Murat.