Redes de poder: Presidente del Senado ¿por consenso?

El aval del grupo Parlamentario del PAN al senador morenista Eduardo Ramírez para que presida la Mesa Directiva de la Cámara alta podría terminar de inclinar la balanza y abrir la puerta a la definición por consenso, nos comentan. Alejandro Armenta, igualmente cercano a Ricardo Monreal, ha dejado entrever que tiene otro proyecto político, que sería la alcaldía de Puebla, por lo que podría “declinar”; mientras que Ovidio Peralta tampoco pondría objeciones por bajarse públicamente de la contienda en el Senado. El único que tiene elementos para seguir en la pelea es el mexiquense Higinio Martínez, por lo que sigue siendo una incógnita si se mantendrá en la búsqueda de votos para la elección del próximo 24 de agosto. Esta semana se van a acelerar las negociaciones en el Senado.

Agenda condicionada

A reserva de que la bancada de Morena en San Lázaro presente su agenda legislativa oficial, el coordinador guinda, Mario Delgado, ya adelantó parte de sus objetivos, entre los que se han propuesto un nuevo intento de eliminar el fuero presidencial, para lo cual se requiere mayoría calificada. Es decir, Morena necesita los votos de todos sus aliados, sobre todo del PT. ¿Por qué es importante recordarlo? Porque los petistas buscan la presidencia de la Mesa Directiva, a pesar de haber un acuerdo fundacional para que el PRI la ocupe durante el último año de esta Legislatura. La posición que tome Morena en esta pugna podría condicionar los votos que requiere para hacer cambios constitucionales. ¿O acaso buscarán esos sufragios con el PRI?

Otro góber futbolero

Ya empieza a causar molestia entre los sinaloenses la atención y el tiempo que el gobernador Quirino Ordaz Coppel le dedica todos los días al equipo de fútbol de Mazatlán, como niño con juguete nuevo. ¿Por qué tanto empeño? El mandatario parece no estar consciente de las problemáticas de la gente, pues en lugar de invertir ese tiempo y recursos en atender las necesidades que son muchas en su estado, anda de porrista. Se encuentra distraído, por decir, lo menos, olvidando muchas de sus obligaciones como máxima autoridad de Sinaloa. Quizá valga la pena recordarle que casi ninguno de los gobernadores que han querido “meterse” a promotores o socios de equipos de fútbol ha terminado bien.

Y quizá también deba recordar las diversas encuestas que ponen a Morena muy a la cabeza en las próximas elecciones a gobernador.