El diputado federal del PAN, Héctor Castillo, aprovechó la rendición de cuentas a la ciudadanía de Santa Catarina, a través de su segundo informe de labores legislativas, para mostrar una nueva imagen en la que expresa su molestia por la inseguridad que se vive en esta localidad.
El rostro de Castillo aparece en camiones y cruceros de manera itinerante con la frase: “regresemos la seguridad”, y en trípticos entregados en la zona de Valle Poniente, un sector que ha vivido episodios de inseguridad, lo que está afectando la venta de departamentos.
Nos dicen que muy probablemente este mismo rostro lo veremos en la próxima elección en busca de la alcaldía de Santa Catarina.
Y quien también cambió su imagen es la diputada federal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Karina Barrón, quien en los trípticos entregados a los vecinos del sur de Monterrey se mostró con sombrero y botas, para informar sobre la vacunación contra la influenza, así como en la entrega de agua por las crisis que se vivieron en Nuevo León.
Karina también busca posicionar su rostro rumbo a la alcaldía de Monterrey, nos dicen.
Las dudas de Víbra Cívica
En la víspera de la elección del próximo año, ha surgido un movimiento denominado “Vibra Cívica”, que pretende registrar a 26 aspirantes para ocupar una curul en el Congreso local.
De acuerdo con este movimiento, estos aspirantes son los nuevos rostros de la política sin partido, pero en la lista aparece, por ejemplo, Alicia Lizárraga, quien fuera titular de Simeprode, que dejó cuentas pendientes por sobrecostos y fue candidata del PAN a diputada federal.
En el listado también se encuentra Ubaldo Ortiz de los Santos, expresidente de la Canaco; o Valdermar Martínez, quien fuera presidente del Colegio de Abogados, entre otros más.
Por ello es que la frase “nuevos rostros” no termina de cuadrar. Sin embargo, habrá que poner lupa sobre el origen del apoyo económico para las campañas que cuestan, y mucho, sobre todo, para evitar la llegada de recursos de procedencia ilícita.