Javier Navarro, secretario de Gobierno de Nuevo León, anda muy movido, pero no en la investigación del paradero de los nueve jóvenes reportados como desaparecidos en Salinas Victoria, sino en búsqueda de acomodarse en otro cargo, dicen, por la posible llegada de Aldo Fasci Zuazua como número 2 del gobernador Samuel García.
El silencio que ha guardado Aldo, ahora que el mandatario se encuentra en el Foro Económico de Davos, es parte del manejo de un perfil bajo hasta que, probablemente, sea nombrado como secretario de Gobierno.
Nos dicen que Navarro intentó negociar con el Congreso para convertirse en el nuevo titular de la Fiscalía Anticorrupción, en caso de que tenga que dejar la Secretaría, una posición que ha buscado desde hace tiempo, especialmente cuando fue presidente del Consejo Cívico.
Pero, nos aseguran, que la respuesta de los legisladores fue un rotundo no. El ofrecimiento para que Navarro no quedara fuera de la administración de García, era tomar el cargo de Óscar Flores, subsecretario de Asuntos Políticos de la Secretaría de Gobierno, quien es muy difícil que acepte una remoción.
Esta parece una decisión congruente después de que no exhibiera una buena política como secretario.
Glen se volvió insostenible
La permanencia de Glen Villarreal Zambrano como director de Comunicación Social del Gobierno central, nos dicen, era insostenible. El funcionario anunció su renuncia al cargo el pasado lunes, horas después de que Reporte Índigo diera a conocer el derroche de millones de pesos sin sustento, además de la contratación de un proveedor con indicios de ser una empresa fachada.
Este despilfarro también fue criticado por la organización Redes Quinto Poder, que dirige Juan Manuel Ramos, incluso.
Más allá de que Glen haya renunciado, la realidad es que nada cambiará, pues el uso de recursos públicos para promover notas positivas en redes sociales del Gobierno de Samuel García continuará.
Con la salida de Glen surgieron rumores de que Julieta López tomaría ese cargo, y que prácticamente, nos dicen, no modificará la manera en la que se maneja la Dirección de Comunicación Social.